Los precios de los metales industriales recuperaron terreno el jueves debido a que conversaciones sobre comercio planeadas entre Estados Unidos y China reactivaron el apetito por activos de mayor riesgo y debilitaban al dólar.
Las preocupaciones de que disputas comerciales y una crisis cambiaria en Turquía dañen el crecimiento económico y la demanda de metales provocó una serie de pérdidas que llevaron el miércoles a que el índice de seis metales de la Bolsa de Metales de Londres (LME) cayera a mínimos de 13 meses, en su peor caída diaria desde julio de 2015.
Sin embargo, el impulso del jueves probablemente durará poco, dijo el analista de Commerzbank Daniel Briesemann, que afirmó que aunque los metales cotizan a precio bajo, aún persiste el pesimismo entre los inversores ante tensiones comerciales y la debilidad cambiaria en mercados emergentes.
El cobre referencial a tres meses en la Bolsa de Metales de Londres (LME) subió un 2,4% a US$5,939 por tonelada, tras caer un 4% y tocar un mínimo de 15 meses de US$5,773 por tonelada en la rueda previa.
El zinc en la LME ganó un 4% a US$ 2,392 por tonelada, luego de caer un 6,3% el miércoles.
El plomo se disparó un 5,9% a US$ 2,040 por tonelada, después de perder un 7,1% el día anterior; y el níquel escaló un 3,7% a US$ 13,325 por tonelada, tras bajar un 4,3% en la víspera.
Los cuatro metales se han desplomado entre un 16% y un 26% desde máximos tocados en junio.
El índice dólar, cuyo movimiento hacia máximos de 13 meses aumentó la presión sobre los metales al hacerlos más caros para los tenedores de otras divisas, caía, y el yuan chino era una de las divisas que más se apreciaba contra el billete verde.
Un respaldo potencial para los precios del cobre parecía haberse disipado después de que la chilena Escondida, la mina de cobre más grande del mundo, dijo que llegó a un acuerdo con trabajadores que amenazaban con una huelga. Eso tuvo lugar después de que se evitó otra huelga en la mina Caserones, también en Chile.