El oro bajaba el viernes y se encaminaba a anotar su mayor caída semanal desde agosto, mientras que el dólar se apreciaba hacia máximos de 16 meses después de que la Reserva Federal (FED) de Estados Unidos mantuvo sin cambios las tasas de interés y se dirigía a realizar otra alza de los tipos en diciembre.

A las 11:22 GMT, el oro al contado bajaba 0,4%, a US$1.218,64 la onza, después de tocar previamente los US$1.217,20 la onza, su nivel más bajo desde el 1 de noviembre.

El oro ha perdido 1% en lo que va de la semana y de cerrar así, sería el mayor declive desde la semana del 17 de agosto.

Los futuros del oro en Estados Unidos caían 0,4%, a US$1.220,3 la onza.

"Es muy claramente un movimiento vinculado con el dólar hoy, lo que ha sucedido desde la más reciente decisión de la FED de Estados Unidos", comentó en analista de Capital Economics Ross Strachan.

El 26 de octubre, el oro al contado tocó un máximo de US$1.243,32 la onza, su nivel más alto desde mediados de julio.

El dólar se apreciaba a un máximo de 16 meses, respaldado por una sólida economía estadounidense y ambiente de tasas de interés, lo que hacía al lingote más caro para los tenedores de otras divisas.

Las alzas de tasas también presionan al oro al aumentar el costo de oportunidad de tener al lingote, que no rinde intereses.

La FED mantuvo las tasas de interés el jueves después de subirlas tres veces este año, pero permanecía encaminada a seguir endureciendo gradualmente los costos del crédito debido a la fortaleza económica, a la aceleración de la inflación y al sólido crecimiento del empleo.

Entre otros metales preciosos, la plata perdía 0,58%, a US$14,32 la onza. El metal se encaminaba a anotar su mayor declive porcentual en nueve semanas, con una merma de 2% hasta ahora.

El platino bajaba 0,38%, a US$860,80 la onza. El metal cedía cerca de 1% en la semana, su mayor caída desde fines de setiembre, mientras que el paladio retrocedía 0,44%, a US$1.119,22 la onza, aunque subía 0,4% en la semana, en su cuarto avance semanal consecutivo.