Encontrar el equilibrio ideal entre los beneficios que ofrece un deporte y los riesgos que conlleva su práctica dependiendo de las características y las preferencias de cada persona.

Ese es el objetivo del primer índice saludable del deporte (Healthy Sport Index), un proyecto desarrollado en Estados Unidos por el Instituto Aspen en conjunto con el Hospital de Cirugía Especial (HSS).

Promovida como la primera herramienta del mundo en este campo, el proyecto se basa en un extenso análisis de la información recogida sobre los 10 deportes más populares entre adolescentes en los colegios estadounidenses, tanto para hombres como para mujeres.

Estos datos se clasificaron con relación a tres variables -actividad física, seguridad y aspecto psicológico social- y a partir de ahí se brinda la oportunidad al usuario de priorizar el aspecto que más le interesa en un deporte.

Gusto personal
Cualquiera puede hacer uso de la herramienta -ni siquiera es necesario registrarse- en la página web de Healthy Sport Index.

Los resultados ofrecen una recomendación detallada de aquellas actividades que más se adecúan a las características de la persona o cuando se trata de escoger el mejor deporte para un niño.

Por ejemplo, si lo que se busca es un mayor énfasis en la actividad física, sin hacer mucho hincapié en la seguridad, pero con cierta preocupación en el desarrollo psicológico y social de la persona, el índice recomienda la práctica de las carreras de campo traviesa tanto para niñas como niños.

Pero si, por el contrario, la prioridad es el aspecto psicológico por encima de la seguridad y la actividad física, aparecen como resultado la natación entre los niños y el tenis entre las niñas.

Dentro de cada deporte también se menciona cuáles son las actividades alternativas o complementarias que existen para cada uno de ellos, como puede ser la gimnasia o el atletismo para los que optan por nadar, o el campo traviesa para las que deciden probar suerte con una raqueta.

"Practicar un deporte es mejor que no jugar ninguno. La mayoría de los padres entienden eso", explicó Tom Farrey, director del programa de Deporte y Sociedad del Instituto Aspen.

"El índice es una herramienta que busca ayudarlos a tomar la mejor decisión para ellos de manera que los jóvenes puedan permanecen involucrados con los deportes, de ser posible de por vida", comentó Farrey en una entrevista publicada en la revista Forbes.

Recomendación
La composición de cada una de las tres grandes variables tomadas en cuenta para la elaboración de la herramienta se determinó gracias al desglose de cada una de ellas en diferentes categorías.

En referencia a la actividad física se específica si fue de alta intensidad, moderada o sedentaria, mientras que en cuanto a la seguridad se observó el número de lesiones, el tiempo que se dejó de practicar el deporte por un problema físico o el porcentaje de conmociones sufridas por sus practicantes.

Con relación al aspecto psicológico social, se estudió cada deporte de acuerdo a la capacidad de interacción social que promueve, la iniciativa, el establecimiento de objetivos, las experiencias negativas, posibles traumas psicológicos, el rendimiento académico y el abuso de sustancias como alcohol o drogas.

Los datos para medir cada una de estas categorías fueron tomados de diversos estudios llevados a cabo en Estados Unidos que contaron con la supervisión del Instituto Aspen y un exhaustivo análisis de doctores y diversos centros docentes.

Con relación al primer grupo se observó la práctica deportiva de 12 secundarias en el estado de Carolina del Norte cubriendo un total de 2.420 atletas.

Los números del segundo surgieron de un estudio de vigilancia sobre estudios a nivel nacional.

En el tercero se contó con la información de una encuesta por todo Estados Unidos que fue analizada por un equipo de la Universidad de Texas junto con datos del estudio "Deportes en adolescentes en América: por qué la participación importa".

Si bien el índice ofrece detalles de cada uno de los deportes que analiza, con recomendaciones específicas de cada uno de ellos y su lugar en comparación con el resto, también aclara que se trata de una herramienta orientativa y que en ningún caso tiene como finalidad determinar que un deporte sea mejor que otro.

Solo el hecho que para un tipo de persona específica puede que haya una actividad que sea más recomendable que otra.