El juez de la bancarrota estadounidense de Sears Holdings, Robert Drain, permitió este jueves que la minorista sobreviva y se salve de la quiebra. El juez de Nueva York aceptó la oferta del presidente de la empresa, Eddie Lampert, por US$5.200 millones, para mantener a flote la empresa.

Este millonario acuerdo también fue alcanzado en enero del 2019 con los liquidadores de Sears para lograr la recompra de la empresa y evitar así el cierre de 400 tiendas.

Fue el pasado 15 de octubre del 2018 cuando Sears se declaró en bancarrota ante un tribunal de Nueva York. En siete años, sus pérdidas financieras ascendieron a US$11.000 millones. El plan de rescate, que estaba pendiente a ser aprobado, apunta que la firma de 16 años de historia pueda mantener unos 45.000 puestos laborales y cerca de 425 establecimientos.

El juez Drain rechazó los argumentos de un grupo de acreedores de que el proceso de venta fuera injusto. Según los acreedores mencionados, Lampert, quien diseñó la fusión entre Sears Roebuck y Kmart en el 2005, saqueó los activos de la compañía y no invirtió lo necesario para que las tiendas mantuvieran una posición importante en el mercado.

Para Drain, los reclamos no deberían interponerse en el camino de venta que Sears busca trazar. En su lugar, dijo que las quejas se abordarán en futuros juicios.

Drain resaltó que a lo largo del caso de bancarrota el ejecutivo de Sears, Lampert, ha sido "objeto de abusos verbales sustanciales".
"Ahora tiene la oportunidad de no ser un personaje de dibujos animados y tomar medidas que de hecho serían de gran significado", dijo Drain, instando a Lampert a que esté abierto con sus planes para los empleados de Sears.