Se dice que una moneda es el precio de esa economía. Si flota libremente, entonces su paridad se determinaría frente a todas las demás monedas en función de distintas variables macroeconómicas, entre las cuales se encuentran su oferta y demanda, las tasas de interés, el crecimiento de la economía, el nivel de endeudamiento, la libertad de entrada y salida de capitales y el saldo de su balanza comercial con respecto a las demás divisas del mundo, entre otras.

Una moneda no se devalúa contra todas, sino contra otra moneda. ¿Puede una divisa fortalecerse o debilitarse contra todas las monedas al mismo tiempo? Es difícil, porque debería hacerlo contra todas las demás, una por una. Lo ideal sería tener un promedio de las demás divisas como para saber qué tanto se aprecia o deprecia una moneda. Para eso, existe el índice DXY, o el Dollar Index Spot, para el dólar estadounidense.

Este indicador señala si el dólar se aprecia o deprecia con respecto a las demás divisas. Cuando el DXY aumenta, el dólar se aprecia frente a las otras monedas, mientras que por el contrario, cuando el DXY baja, el billete verde se deprecia.

¿Qué es exactamente el DXY? El Índice DXY compara diariamente el comportamiento del dólar estadounidense frente a las otras seis principales divisas del mundo: el euro, el yen japonés, la libra esterlina, el dólar canadiense, la corona sueca y el franco suizo.

El cálculo es un promedio geométrico de las monedas de esos seis socios comerciales, los principales en su momento, aunque ya no lo son en la actualidad.

Para su cálculo, se ponderan las tasas de cambio del dólar frente a las divisas mencionadas de la siguiente manera:

• Dólar-Euro (USDEUR): 57,6%
• Dólar-Yen Japonés (USDJPY): 13,6%
• Dólar-Libra Esterlina (USDGBP): 11,9%
• Dólar- Dólar Canadiense (USDCAD): 9,1%
• Dólar-Corona Sueca (USDSEK): 4,2%
• Dólar-Franco Suizo (USDCHF): 3,6%

En realidad, los pares que se usan en la actualidad son: EURUSD, USDJPY, GBPUSD, USDCAD, USDSEK y USDCHF, es decir tomando la inversa para el euro y la libra británica.

De manera que la fórmula utilizada para el cálculo es la siguiente:

USDX = 50,14348112 × EURUSD-0,576 × USDJPY0,136 × GBPUSD-0,119 × USDCAD0,091 × USDSEK0,042 × USDCHF0,036

Las reglas para su cálculo fueron actualizadas sólo una vez, en 1999, para reflejar la introducción del euro.

Al ser un índice, no se puede comprar. Pero existe un mercado de futuros que puede operarse cada tres meses: con vencimiento en marzo, junio, septiembre y diciembre. El contrato de futuro del DXY cotiza en el mercado ICE. Podrán ver los detalles aquí. Puede operarse tanto en Nueva York como en Londres y Singapur, lo que lo dota de una jornada de trading continua, dado que los horarios de operatoria y pre- operatoria (premarket) son los siguientes:


HOARIO DE TRADING DEL FUTURO DE DXY PRE-APERTURA

Nueva York 8:00 PM - 5:00 PM* ( 20:00 - 17:00) 7:30 PM (19:30)
Londres 1:00 AM - 10:00 PM (01:00 - 22:00) 12:30 AM (00:30)
Singapur 8:00 AM - 5:00 AM* (08:00 - 05:00) 7:30 AM (07:30)

Nota: *=Día siguiente

El índice fue creado en marzo de 1973 con un valor de base igual a 100. Se creó poco tiempo después que el sistema de Bretton Woods caducara.

El dólar estadounidense ha sido la moneda dominante desde finales de la Segunda Guerra Mundial, momento en el cual las principales potencias adoptaron el orden monetario conocido como el sistema de Bretton Woods. En ese nuevo esquema, se adoptó un patrón basado en el oro, combinado con tasas de interés ajustables de las demás divisas contra el billete verde. Este último mantenía una conversión fija frente al oro de 35 dólares por libra. El dólar pasó así a estar anclado al oro, el cual se convirtió en moneda de reserva y fortaleció su divisa frente a todas las demás.

El sistema de Bretton Woods duró hasta 1973. En ese año, Richard Nixon canceló la relación dólar-oro por el elevado costo de la guerra de Vietnam, que ejerció un efecto devaluatorio sobre la moneda estadounidense. A partir de ese momento, el dólar comenzó a flotar libremente y nunca más dependió de las reservas de oro.

Si bien el DXY es una muestra de monedas diversificada, no refleja casi nada la ponderación del comercio de los EE.UU. por países, por lo que no podemos tomar este índice como una fuente de información exacta de la competitividad de las empresas estadounidenses. No es ni siquiera un indicador de tipo de cambio multilateral porque no toma en cuenta los índices de inflación de todos los países. Pero sí nos da una pista acerca de qué tan fuerte o tan débil se va tornando el dólar frente a las principales divisas mundiales.

En julio de 2001, el Dólar Index estaba cerca de 120, pero luego cayó. Estamos reviviendo en los últimos dos años un dólar más fuerte, pero no muy diferente del valor que tenía el índice en 1973, al menos tomando como referencia esas seis divisas globales.

Hay que aclarar que el DXY no incluye al yuan chino y que posiblemente sea parte del índice a partir del mes de octubre 2016. Eso le dará una mayor relevancia al mismo, y sobre todo, una mejor idea de la competitividad de su economía.

Dada la elevada participación del euro dentro de este índice, del 57,6%, si la visión para el euro es bajista, casi con seguridad que veremos a un índice DXY con mayor fortaleza a futuro.

En síntesis, el Índice Dólar (Dollar Index Spot) registra diariamente el comportamiento del dólar estadounidense frente a las seis principales divisas del mundo, una referencia casi obligada para todos aquellos que operan Forex y que siguen de cerca a los commodities (por su relación inversa).