Luis trader
25-09-2018, 07:59 PM
La venta de la histórica casa italiana Versace al grupo de moda estadounidense Michael Kors por US$ 2,120 millones es una pérdida más del "Made in Italy", que en los últimos tiempos ha visto a marcas como Valentino o La Perla pasar a manos extranjeras.
Michael Kors anunció hoy que ha acordado adquirir la firma italiana Gianni Versace y a partir de ahora esta casa de más de 40 años de historia pasará a llamarse Capri Holdings.
La operación está sujeta a la aprobación de los entes reguladores competentes y prevista para el cuarto trimestre del año, pero en Italia ya lloran la nueva pérdida de una firma textil del país.
"Golpe al 'Made in Italy'" titula hoy el diario Il Messaggero; "La casa de la Medusa pasa a manos estadounidenses", dice La Stampa, y "La Repubblica" opta por "el mito de Versace se vuelve estadounidense".
Creada en los años setenta por el diseñador Gianni Versace, la marca ha sido desde entonces una de las de mayor éxito en el sector del lujo italiano y mundial.
Gianni Versace logró traspasar todas las fronteras y convertir su marca en una de las casas de moda más deseadas por las élites y las clases más pudientes.
Fue uno de los diseñadores italianos más famosos y admirados a nivel internacional pero su vida acabó en 1997, cuando estaba en la cima del éxito, al ser asesinado a tiros en su mansión, un suceso que conmocionó al mundo y en torno al cual ha habido siempre numerosas incógnitas.
Con su muerte, la firma milanesa pasó a ser de la familia Versace.
Por voluntad de Gianni, Donatella, su hermana y directora creativa de la firma, se quedó con un 20%, mientras que la hija de ésta, Allegra -entonces menor de edad- obtuvo un 50%, y el tercero de los hermanos, Santo, se quedó con un 30%.
Pero la firma ha atravesado dificultades económicas desde entonces y en 2014 permitió que entrara en su capital el fondo Blackstone, que se quedó con un 20% mientras que el 80% del capital siguió en manos de la familia.
A pesar de los intentos de relanzar su competitividad en los últimos años, Versace cerró en 2017 con un beneficio de solo 15 millones de euros por lo que ha acabado permitiendo su venta a Michael Kors, que ya había mostrando interés por la casa de moda.
Tras adquirir el año pasado la marca de calzado Jimmy Choo, el grupo estadounidense conocido por sus bolsos está decidido a crear un imperio del lujo para competir contra marcas potentes en el sector como las francesas LMVH y Kering.
A partir de ahora, Michael Kors será el propietario de la empresa resultante, Capri Holdings, y la intención es que ingrese cerca de US$ 8,000 millones a largo plazo.
Por su parte, la familia Versace seguirá manteniendo una participación minoritaria en la nueva marca.
Michael Kors pagará la mayor parte del precio de compra en efectivo y la familia Versace recibirá 150 millones de euros (US$ 176.7 millones) en acciones.
Italia lamenta la pérdida de otra de sus icónicas marcas, después de que en los últimos tiempos Valentino haya pasado a manos del fondo catarí Mayhoola, mientras que La Perla es actualmente de los holandeses Sapinda, y Krizia ha sido comprada por los chinos Marisfrolg.
El ministro del Interior y líder de la ultraderechista Liga, Matteo Salvini, también ha comentado la noticia y ha afirmado que está "cansado de que las mejores marcas de moda, alimentación, tecnología italiana sean compradas en el extranjero".
El secretario general del sindicato textil Uiltec, Paolo Pirani, ha opinado por su parte que la venta de Versace confirma la "degradación que afecta a la industria italiana, con un mercado internacional" potente y unas "excelencias nacionales que pierden valor".
Michael Kors anunció hoy que ha acordado adquirir la firma italiana Gianni Versace y a partir de ahora esta casa de más de 40 años de historia pasará a llamarse Capri Holdings.
La operación está sujeta a la aprobación de los entes reguladores competentes y prevista para el cuarto trimestre del año, pero en Italia ya lloran la nueva pérdida de una firma textil del país.
"Golpe al 'Made in Italy'" titula hoy el diario Il Messaggero; "La casa de la Medusa pasa a manos estadounidenses", dice La Stampa, y "La Repubblica" opta por "el mito de Versace se vuelve estadounidense".
Creada en los años setenta por el diseñador Gianni Versace, la marca ha sido desde entonces una de las de mayor éxito en el sector del lujo italiano y mundial.
Gianni Versace logró traspasar todas las fronteras y convertir su marca en una de las casas de moda más deseadas por las élites y las clases más pudientes.
Fue uno de los diseñadores italianos más famosos y admirados a nivel internacional pero su vida acabó en 1997, cuando estaba en la cima del éxito, al ser asesinado a tiros en su mansión, un suceso que conmocionó al mundo y en torno al cual ha habido siempre numerosas incógnitas.
Con su muerte, la firma milanesa pasó a ser de la familia Versace.
Por voluntad de Gianni, Donatella, su hermana y directora creativa de la firma, se quedó con un 20%, mientras que la hija de ésta, Allegra -entonces menor de edad- obtuvo un 50%, y el tercero de los hermanos, Santo, se quedó con un 30%.
Pero la firma ha atravesado dificultades económicas desde entonces y en 2014 permitió que entrara en su capital el fondo Blackstone, que se quedó con un 20% mientras que el 80% del capital siguió en manos de la familia.
A pesar de los intentos de relanzar su competitividad en los últimos años, Versace cerró en 2017 con un beneficio de solo 15 millones de euros por lo que ha acabado permitiendo su venta a Michael Kors, que ya había mostrando interés por la casa de moda.
Tras adquirir el año pasado la marca de calzado Jimmy Choo, el grupo estadounidense conocido por sus bolsos está decidido a crear un imperio del lujo para competir contra marcas potentes en el sector como las francesas LMVH y Kering.
A partir de ahora, Michael Kors será el propietario de la empresa resultante, Capri Holdings, y la intención es que ingrese cerca de US$ 8,000 millones a largo plazo.
Por su parte, la familia Versace seguirá manteniendo una participación minoritaria en la nueva marca.
Michael Kors pagará la mayor parte del precio de compra en efectivo y la familia Versace recibirá 150 millones de euros (US$ 176.7 millones) en acciones.
Italia lamenta la pérdida de otra de sus icónicas marcas, después de que en los últimos tiempos Valentino haya pasado a manos del fondo catarí Mayhoola, mientras que La Perla es actualmente de los holandeses Sapinda, y Krizia ha sido comprada por los chinos Marisfrolg.
El ministro del Interior y líder de la ultraderechista Liga, Matteo Salvini, también ha comentado la noticia y ha afirmado que está "cansado de que las mejores marcas de moda, alimentación, tecnología italiana sean compradas en el extranjero".
El secretario general del sindicato textil Uiltec, Paolo Pirani, ha opinado por su parte que la venta de Versace confirma la "degradación que afecta a la industria italiana, con un mercado internacional" potente y unas "excelencias nacionales que pierden valor".