notiforex
04-12-2019, 02:01 PM
En los últimos días hemos podido leer en la prensa cómo los brókeres, representados por la Asociación de Mercados Financieros de Europa (AFME) y la Asociación de Inversores (IA), han solicitado por carta a la Bolsa de Londres (LSE) y a otros mercados europeos una reducción de sus horarios de negociación. Esta petición implicaría acortar la jornada actual, que va desde las nueve de la mañana a las cinco y media de la tarde, para pasar a un nuevo horario de diez de la mañana a cinco de la tarde.
La principal motivación esgrimida por estos colectivos es la de tratar de concentrar la liquidez (es decir, el volumen de negociación de los títulos) en las sesiones. Con esta medida, se pretende alcanzar unos costes más coherentes y otorgar algo más de tiempo a los inversores para asimilar y reaccionar a los anuncios corporativos, que se suelen producir antes de la apertura del mercado o después de su cierre.
En la misiva enviada a los responsables de los mercados europeos se argumenta que “esta reducción de 90 minutos en el horario crearía unos mercados más eficientes, lo cual beneficiaría a ahorradores e inversores”. Según los firmantes, la primera hora de negociación es el momento más caro para operar, ya que atrae poca liquidez, mientras que la última hora concentra habitualmente más de un tercio del volumen total del día.
La principal motivación esgrimida por estos colectivos es la de tratar de concentrar la liquidez (es decir, el volumen de negociación de los títulos) en las sesiones. Con esta medida, se pretende alcanzar unos costes más coherentes y otorgar algo más de tiempo a los inversores para asimilar y reaccionar a los anuncios corporativos, que se suelen producir antes de la apertura del mercado o después de su cierre.
En la misiva enviada a los responsables de los mercados europeos se argumenta que “esta reducción de 90 minutos en el horario crearía unos mercados más eficientes, lo cual beneficiaría a ahorradores e inversores”. Según los firmantes, la primera hora de negociación es el momento más caro para operar, ya que atrae poca liquidez, mientras que la última hora concentra habitualmente más de un tercio del volumen total del día.