Arlette
02-07-2015, 06:43 PM
Algunos inversores sienten absoluta devoción por los llamados indicadores u osciladores técnicos, los cuales por definición suponen ser una formulación de expresiones matemáticas y estadísticas con el objetivo de suavizar o predecir la tendencia de los precios con la suficiente anticipación como para actuar adecuadamente, es decir, su función es la de tomar la temperatura del mercado accionario. Por el contrario, otros inversores consideran estos indicadores una especie de brujería.
Sin embargo, el factor clave para hacer un uso apropiado de estas herramientas que pueden resultar muy útiles como complemento del análisis fundamental, está en identificar, entre la gran variedad que existe en el mundo financiero, cuáles son los medidores que realmente aportan información de valor para su estrategia de negocios.
A continuación presentamos los indicadores más importantes a seguir para anticiparse a los acontecimientos e invertir de forma exitosa.
De acuerdo con un reciente artículo escrito por el experto financiero Simon Maierhofer para la web financiera Market Watch, los dos indicadores que todo inversor debería monitorear por haber arrojado con frecuencia tendencias acertadas del mercado en períodos no muy lejanos, como por ejemplo, la racha de estancamiento que ha experimentado el índice S&P 500 en los últimos 6 meses.
Se trata de las “líneas de resistencia a largo plazo” y el llamado indicador RSI o del “momentum a largo plazo”, cuya combinación se convierte en un indicador técnico a corto plazo bastante efectivo.
Prosiguiendo con el ejemplo del S&P 500, es posible identificar que según el registro estadístico de su desempeño, éste se ha mantenido por debajo de la línea roja ascendente y no llega a tocar la línea roja horizontal. Ambas líneas representan el la evolución del S&P 500 durante años, e incluso décadas.
El RSI define la tendencia reciente del índice claramente, y la ubicación de este medidor en la “zona roja” coincide con los desplomes del índice bursátil, mientras que su posicionamiento en la “zona verde” concuerda con los repuntes, lo que demuestra la precisión con la que puede leerse el mercado en función de esta fórmula.
Sin embargo, así como los inversores diversifican su cartera de inversión con nuevos activos en función de sus intereses, nivel de riesgo y búsqueda de rendimientos, también deben hacer el mismo trabajo con los indicadores que utilizan, puesto que los mismos atraviesan ciclos de altibajos y no se adaptan a todos los segmentos del mercado.
A este respecto, Maierhofer señala que se puede combinar este análisis técnico con las investigaciones propias, así como a los patrones estacionales que puedan ser aplicados a cada rubro financiero y a las referencias de oferta y demanda.
Cuando estas cuatro variables vayan en la misma dirección se podrá visualizar una señal bastante clara de lo que sucederá en la plaza accionaria desde una perspectiva objetiva.
Siguiendo de cerca estos indicadores podrá realizar un análisis técnico más completo sobre las distintas alternativas de inversión que puede incorporar a su cartera de negocios en función de sus preferencias.
Sin embargo, el factor clave para hacer un uso apropiado de estas herramientas que pueden resultar muy útiles como complemento del análisis fundamental, está en identificar, entre la gran variedad que existe en el mundo financiero, cuáles son los medidores que realmente aportan información de valor para su estrategia de negocios.
A continuación presentamos los indicadores más importantes a seguir para anticiparse a los acontecimientos e invertir de forma exitosa.
De acuerdo con un reciente artículo escrito por el experto financiero Simon Maierhofer para la web financiera Market Watch, los dos indicadores que todo inversor debería monitorear por haber arrojado con frecuencia tendencias acertadas del mercado en períodos no muy lejanos, como por ejemplo, la racha de estancamiento que ha experimentado el índice S&P 500 en los últimos 6 meses.
Se trata de las “líneas de resistencia a largo plazo” y el llamado indicador RSI o del “momentum a largo plazo”, cuya combinación se convierte en un indicador técnico a corto plazo bastante efectivo.
Prosiguiendo con el ejemplo del S&P 500, es posible identificar que según el registro estadístico de su desempeño, éste se ha mantenido por debajo de la línea roja ascendente y no llega a tocar la línea roja horizontal. Ambas líneas representan el la evolución del S&P 500 durante años, e incluso décadas.
El RSI define la tendencia reciente del índice claramente, y la ubicación de este medidor en la “zona roja” coincide con los desplomes del índice bursátil, mientras que su posicionamiento en la “zona verde” concuerda con los repuntes, lo que demuestra la precisión con la que puede leerse el mercado en función de esta fórmula.
Sin embargo, así como los inversores diversifican su cartera de inversión con nuevos activos en función de sus intereses, nivel de riesgo y búsqueda de rendimientos, también deben hacer el mismo trabajo con los indicadores que utilizan, puesto que los mismos atraviesan ciclos de altibajos y no se adaptan a todos los segmentos del mercado.
A este respecto, Maierhofer señala que se puede combinar este análisis técnico con las investigaciones propias, así como a los patrones estacionales que puedan ser aplicados a cada rubro financiero y a las referencias de oferta y demanda.
Cuando estas cuatro variables vayan en la misma dirección se podrá visualizar una señal bastante clara de lo que sucederá en la plaza accionaria desde una perspectiva objetiva.
Siguiendo de cerca estos indicadores podrá realizar un análisis técnico más completo sobre las distintas alternativas de inversión que puede incorporar a su cartera de negocios en función de sus preferencias.