Arlette
21-01-2016, 08:54 PM
En momentos como el actual, las principales Bolsas del mundo parecen atravesar una corrección. Durante los pocos días transcurridos de 2016, se han producido desplomes de gran magnitud en los mercados, principalmente por los temores que produce la situación económica y financiera de China.
En las tres primeras ruedas bursátiles de 2016, la renta variable internacional arrojó pérdidas estimadas en 2,5 billones de dólares, de acuerdo a datos de Casey Research.
En medio de este contexto, los inversores se preguntan qué hacer en caso de que se avecine una recesión. ¿Esperar y mantener presencia en el mercado accionario? ¿Iniciar la retirada?
Los analistas financieros consideran que la estrategia de los inversores debe centrarse en mantener la calma, pensando en los resultados que obtendrán con sus inversiones a largo plazo. Es decir, nunca hay que perder de vista que los mercados pueden tener épocas difíciles.
Si el nivel de volatilidad que presenta la plaza accionaria de hoy preocupa a los inversores, significa que éstos cuentan con posiciones a muy corto plazo, dice un reporte de Market Watch.
Un aspecto clave a tener en cuenta es que nadie tiene la habilidad de predecir con exactitud el curso a seguir por los mercados: cuando se está en presencia de una bonanza, las masas tienden a sentirse entusiastas con respecto a redoblar las apuestas, y cuando por el contrario, se produce una corrección, el rebaño opta por huir y abandonar los activos expuestos a tal comportamiento.
Sin embargo, es una actitud errada, sobre todo si se cuenta con un portfolio balanceado y bien diversificado.
En 2015, el nivel de volatilidad se mantuvo por debajo del promedio, por lo que los inversores deben estar conscientes de que esa tendencia no puede ser permanente.
¿Corrección o crisis?
El escenario financiero actual nada tiene que ver con un colapso. La última vez que un evento de este tipo tuvo lugar, los desplomes se calcularon en 50%, lo que dista mucho de las bajas actuales.
Es más, una de las 10 “verdades del mercado” profesadas por los que más saben del tema establece el hecho básico de que “a veces, las acciones caen”. Es algo totalmente natural.
No obstante, muchos toman malas decisiones cuando esto sucede.
Las correcciones no deben ser vistas como un acontecimiento negativo, especialmente si no son muy largas. De hecho, pueden ser saludables debido a que ayudan a restablecer los valores reales de los activos de acuerdo con los fundamentos de cada uno.
El reconocido inversor y consejero económico jefe de la firma Allianz, Mohamed El-Erian, declaró recientemente que la corrección que están viviendo hoy las acciones traerá consigo oportunidades muy atractivas en el futuro cercano, según CNN Money.
¿Qué hacer, entonces, en un escenario de este tipo?
De persistir la baja en la Bolsa, la sugerencia gira en torno a evitar aquellos papeles que se perfilen como alternativas sobrevaluadas, así como las compañías que tienden a presentar dificultades para generar ganancias en épocas de desaceleración económica.
Asimismo, si usted cuenta con un extra de dinero líquido disponible y se atreve a reforzar su presencia en el mercado accionario, no dude en hacerlo: es buen momento para aprovechar las oportunidades en oferta.
Y por último, para decidir en qué dirección apuntar en este particular, usted como inversor debe tener pleno conocimiento de cuáles son los mercados específicos que se encuentran en corrección, los drivers del fenómeno y la magnitud del mismo.
En las tres primeras ruedas bursátiles de 2016, la renta variable internacional arrojó pérdidas estimadas en 2,5 billones de dólares, de acuerdo a datos de Casey Research.
En medio de este contexto, los inversores se preguntan qué hacer en caso de que se avecine una recesión. ¿Esperar y mantener presencia en el mercado accionario? ¿Iniciar la retirada?
Los analistas financieros consideran que la estrategia de los inversores debe centrarse en mantener la calma, pensando en los resultados que obtendrán con sus inversiones a largo plazo. Es decir, nunca hay que perder de vista que los mercados pueden tener épocas difíciles.
Si el nivel de volatilidad que presenta la plaza accionaria de hoy preocupa a los inversores, significa que éstos cuentan con posiciones a muy corto plazo, dice un reporte de Market Watch.
Un aspecto clave a tener en cuenta es que nadie tiene la habilidad de predecir con exactitud el curso a seguir por los mercados: cuando se está en presencia de una bonanza, las masas tienden a sentirse entusiastas con respecto a redoblar las apuestas, y cuando por el contrario, se produce una corrección, el rebaño opta por huir y abandonar los activos expuestos a tal comportamiento.
Sin embargo, es una actitud errada, sobre todo si se cuenta con un portfolio balanceado y bien diversificado.
En 2015, el nivel de volatilidad se mantuvo por debajo del promedio, por lo que los inversores deben estar conscientes de que esa tendencia no puede ser permanente.
¿Corrección o crisis?
El escenario financiero actual nada tiene que ver con un colapso. La última vez que un evento de este tipo tuvo lugar, los desplomes se calcularon en 50%, lo que dista mucho de las bajas actuales.
Es más, una de las 10 “verdades del mercado” profesadas por los que más saben del tema establece el hecho básico de que “a veces, las acciones caen”. Es algo totalmente natural.
No obstante, muchos toman malas decisiones cuando esto sucede.
Las correcciones no deben ser vistas como un acontecimiento negativo, especialmente si no son muy largas. De hecho, pueden ser saludables debido a que ayudan a restablecer los valores reales de los activos de acuerdo con los fundamentos de cada uno.
El reconocido inversor y consejero económico jefe de la firma Allianz, Mohamed El-Erian, declaró recientemente que la corrección que están viviendo hoy las acciones traerá consigo oportunidades muy atractivas en el futuro cercano, según CNN Money.
¿Qué hacer, entonces, en un escenario de este tipo?
De persistir la baja en la Bolsa, la sugerencia gira en torno a evitar aquellos papeles que se perfilen como alternativas sobrevaluadas, así como las compañías que tienden a presentar dificultades para generar ganancias en épocas de desaceleración económica.
Asimismo, si usted cuenta con un extra de dinero líquido disponible y se atreve a reforzar su presencia en el mercado accionario, no dude en hacerlo: es buen momento para aprovechar las oportunidades en oferta.
Y por último, para decidir en qué dirección apuntar en este particular, usted como inversor debe tener pleno conocimiento de cuáles son los mercados específicos que se encuentran en corrección, los drivers del fenómeno y la magnitud del mismo.