Cambio de sede fiscal de McDonald's no afectará a la investigación de la CE

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La Comisión Europea (CE) recalcó hoy a Efe que si McDonald's traslada su sede fiscal de Luxemburgo a Reino Unido, la investigación que mantiene a la cadena de comida rápida estadounidense no se verá afectada, ya que se refiere a beneficios fiscales que podría haber recibido en el pasado.

"Cualquier cambio en la estructura de McDonald's en un futuro no afectará a la investigación en curso en la Unión Europea sobre ayudas estatales, respecto a una posible ventaja que McDonald's podría haber recibido a través de las pactos fiscales en Luxemburgo emitidos en 2009", señaló una portavoz de la CE.

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Ésta fuente resaltó que la investigación "está en curso" e insistió en que mientras esto sea así, no se puede "prejuzgar" en qué sentido se pronunciará la Comisión.

El diario "Financial Times" publicó en septiembre que la Comisión podría obligar a la cadena de comida rápida a devolver 500 millones de euros a Luxemburgo en concepto de impuestos que no pagó en el país por un tratamiento fiscal ventajoso que podría declararse ilegal.

El diario británico apunta que la cadena de hamburgueserías pagó de media un impuesto de sociedades del 1,49 % sobre un beneficio de 1.800 millones desde que en 2009 instaló su sede europea en Luxemburgo.

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De esa forma, McDonald's habría evitado el pago de ese gravamen por sus actividades en Europa tanto en Estados Unidos como en Luxemburgo, donde el tipo medio para las sociedades es del 29,2 %, siempre según "Financial Times".

La investigación a la multinacional de comida rápida se hizo pública un mes después de que Bruselas exigiera al gigante tecnológico estadounidense Apple devolver a Irlanda 13.000 millones de euros por impuestos no abonados al país.

Esa decisión contra la firma de la manzana provocó una oleada de protestas entre grandes grupos de EEUU con actividades en la Unión Europa (UE), para intentar evitar que se apliquen sanciones similares a otras multinacionales transatlánticas como Amazon o McDonald's, ambas en el punto de mira de Bruselas.