Mediaset, dispuesta a cambiar la gobernanza de la televisión paneuropea por Vivendi

MILÁN, 5 nov (Reuters) - La cadena italiana Mediaset está dispuesta a modificar la gobernanza en la reorganización de su negocio de televisión paneuropeo para llegar a un compromiso con el accionista Vivendi (PA:VIV), dijo el martes una fuente.

La mayor televisión comercial de Italia quiere fusionar su negocio nacional con la filial Mediaset España (MC:TL5) en una entidad con sede en Holanda llamada MediaforEurope, con vistas a alcanzar acuerdos paneuropeos en el sector.

Pero Vivendi, el segundo mayor accionista del grupo controlado por la familia del ex primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, ha cuestionado el plan.

Se esperaba que un tribunal de Milán tomase esta semana una decisión sobre la petición de Vivendi de congelar los planes de reorganización de Mediaset.

En un comunicado divulgado el martes, Mediaset dijo que el tribunal había prorrogado la fecha límite hasta el 22 de noviembre para dar tiempo a que las dos partes lleguen a un acuerdo.

(Información de Elvira Pollina, escrito por Stephen Jewkes, traducido por Laura Hijón en la redacción de Gdansk)

El beneficio neto del banco italiano, que fue recapitalizado cautelarmente en 2017, fue de 94 millones de euros, un 43 % menos que los 65 millones registrados en el segundo trimestre de 2019.

El resultado operativo bruto del tercer trimestre se situó en 262 millones de euros, un 54,6 % más respecto a los 169 millones del trimestre anterior, y el neto fue de 149 millones, un 81 % superior a los 81,9 millones del segundo trimestre.

MPS confirmó el objetivo de llegar a finales de 2019 de una ratio de exposición bruta a créditos de mala calificación (NPE, en inglés) del 12,5 % y el objetivo del 12,9 % para 2021.

La incidencia neta en términos de créditos deteriorados disminuyó a 6.900 millones de euros (500 millones menos en comparación con junio de 2019 y 1.000 millones a fecha del 31 de diciembre de 2018).

El banco se benefició en 2017 de un plan de ayudas estatales que fue aprobado por Bruselas conocido como recapitalización cautelar, una excepción de la normativa europea sobre resolución bancaria que establece un reparto de la carga de las pérdidas de las entidades entre inversores privados.