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Cuba aspira a crecer un 2 % en 2017 año, tras un 2016 con "limitaciones financieras" en el que el PIB creció un 0,9 %, por debajo del 1 % previsto, anunció hoy el ministro de Economía y Planificación de la isla, Ricardo Cabrisas.
En la presentación de su informe a la Asamblea Nacional de Cuba (Parlamento unicameral), el ministro explicó que para 2017 se prevé un crecimiento del 2 % del PIB frente al 0,9 % de este año.
Según Cabrisas, el mayor crecimiento se prevé en la industria azucarera, el sector hotelero y la hostelería, con buenos resultados este año, señala la Agencia Cubana de Noticias (ACN), que reporta sobre el plenario del Parlamento cubano, al que no tienen acceso medios extranjeros acreditados en el país.
Además se esperan incrementos en las áreas de transporte, comunicaciones, agricultura, silvicultura, comercio e industria manufacturera.
Cabrisas confirmó que existe una "tensa" situación "con la disponibilidad de divisas, el incumplimiento de los ingresos previstos por las exportaciones y el insuficiente suministro de combustible", causados por la reducción de los envíos de crudo subsidiado por parte de Venezuela.
El ministro se refirió además a los daños causados por el embargo que EEUU mantiene sobre Cuba, "cuyos efectos extraterritoriales se han fortalecido en los últimos años" a pesar del deshielo en las relaciones bilaterales y serán difíciles de revertir a corto plazo.
Agregó que se deberá "identificar las posibilidades para sustituir importaciones, reducir al mínimo los gastos no imprescindibles y usar eficientemente los recursos que se entregan".
Según datos oficiales, de las inversiones para 2017, sólo el 6,5 % tiene participación extranjera, por lo que Cuba no logra sus aspiraciones de captar todo el capital foráneo necesario "para el progreso de la economía nacional".
El ministro subrayó que es necesario elaborar un programa a medio plazo para "revertir la crítica situación de la industria alimentaria" y "evitar el pago de salarios sin respaldo productivo".
Cabrisas llamó a "mantener estricto seguimiento al equilibrio monetario entre la población y asegurar las actividades de salud, educación y de otros servicios básicos".
Según el informe, la producción de petróleo y gas decrecerá un 4,3 % con respecto a 2016, aunque se prevé alcanzar niveles similares a los de este año, "con un crecimiento de los niveles productivos del 6,9 %", según informa la web oficial Cubadebate.
Tras crecer un 4 % en 2015, el Gobierno cubano pronosticó un aumento del PIB del 2 % en 2016, objetivo que a mitad de año rebajó al 1 % por "dificultades financieras coyunturales".
La crisis en Venezuela le obligó a recortar el suministro de crudo subsidiado a Cuba en la primera mitad de 2016, por lo que el Gobierno cubano se vio obligado a contactar con países aliados, como Rusia, Argelia y Angola, en busca de nuevos socios comerciales.
Ante esta coyuntura, analistas económicos vaticinan una probable recesión económica en la isla que podría retrasar la marcha de las reformas de Raúl Castro.
Sin embargo, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) prevé que en 2017 el crecimiento económico de Cuba comenzará a acelerarse paulatinamente por la regularización de envíos de combustible desde Venezuela y el empuje de los sectores de telecomunicaciones, turismo, construcción y agricultura.