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Los ingresos de tres cuartas partes de los hogares griegos (75,3 %) se redujeron en 2016 en relación con el año precedente, y un tercio (32,6 %) tiene al menos un miembro en la familia desempleado, según una encuesta del instituto de las pymes helenas (IME) publicado hoy.
Según el sondeo, el 73,5 % de los hogares estiman que su situación financiera empeorará en 2017 frente a un 5,1 % que esperan una mejora de sus ingresos.
El 37,1 % de los hogares consultados tiene ingresos inferiores a 10.000 euros anuales, un porcentaje ligeramente más alto que en 2015 (36,3 %).
Apenas un 1,5 % de las familias griegas consiguieron ahorrar dinero en 2016, mientras un 16 % declaró que sus ingresos no alcanzan para cubrir sus necesidades básicas.
Más de uno cada cinco hogares (22,4 %) declararon que al menos un miembro suyo trabaja por menos de 586 euros mensuales brutos, el salario mínimo interprofesional establecido desde 2012 en Grecia.
El estudio destaca asimismo que casi la mitad de las familias griegas (49,2 %) se sustenta principalmente en la pensión de alguno de sus miembros
l 65,3 % de los encuestados señalaron que en 2016 debieron recortar gastos: el 53 % lo hizo en la compra de ropa y zapatos, el 48,2 % en ocio y el 40,2 % en alimentos.
Más de la mitad de los hogares griegos admitieron que pospusieron una consulta médica o el inicio de una terapia por dificultades financieras.
La crisis ha llevado a muchos griegos a probar suerte en el extranjero y, según el sondeo, más de 400.000 familias cuentan con al menos un miembro que ha tenido que emigrar.
Además de los que ya se han marchado, un 42 % de los griegos se plantean buscar trabajo en otro país si no encuentran opciones en Grecia, porcentaje que entre los más jóvenes (18-35 años) sube al 67,7 %.
El 21,4 % de los hogares griegos admitieron tener deudas atrasadas con la Hacienda y otro 34 % cree que no podrá pagar sus impuestos en 2017.