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Japón logró en febrero un superávit por cuenta corriente de 2,81 billones de yenes (unos 23.851 millones de euros/ 25.300 millones de dólares), según informó hoy el Gobierno.
La cifra supone el trigésimo segundo mes consecutivo de saldo positivo para la tercera economía mundial y es un 18,3 por ciento mayor que la cosechada en el mismo mes del año pasado.
La balanza comercial japonesa dejó un superávit de 1,08 billones de yenes (9.167 millones de euros/ 9.694 millones de dólares), más del doble que el anotado en febrero de 2015.
Las exportaciones avanzaron un 12,2 por ciento interanual hasta los 6,33 billones de yenes (53.697 millones de euros/ 56.813 millones de dólares).
Las importaciones se incrementaron por su parte en un 0,3 por ciento, hasta los 5,27 billones de yenes (44.705 millones de euros/ 47.297 millones de dólares).
La balanza de servicios registró un déficit de 63.900 millones de yenes (542 millones de euros/ 573 millones de dólares), lo que contrasta con el superávit de un año antes.
La cuenta de rentas primarias tuvo un superávit de 1,97 billones de yenes (16.710 millones de euros/ 17.678 millones de dólares), aunque la cifra fue inferior a la de hace un año en un 1,9 por ciento.
La de rentas secundarias reflejó una salida de capitales por valor de 174.500 millones de yenes (1.480 millones de euros/ 1.565 millones de dólares), un 12,2 por ciento interanual menos.
La balanza de pagos, que refleja los pagos e ingresos por intercambios con el exterior de bienes, servicios, rentas y transferencias, está considerada uno de los indicadores comerciales más amplios de un país.