Sindicatos UE piden emplear convenios colectivos contra la violencia machista

La Confederación Europea de Sindicatos (CES) instó hoy a utilizar los convenios de negociación colectiva para luchar contra la violencia de género en el ámbito laboral y doméstico, de forma que estos se conviertan en documentos "integrales" que ayuden a abordar este problema social.

A través del informe "Seguridad en casa, seguridad en el trabajo", presentado hoy en una conferencia en Bruselas, la CES señala que un número creciente de sindicatos y algunos empleadores reconocen "la función del lugar de trabajo en la prevención de violencia domestica".

Las medidas aplicadas en el lugar de trabajo, como la baja temporal remunerada, asesoramiento, apoyo, planificación inicial de seguridad (...) son algunas de las maneras en que los representantes sindicales han apoyado a las víctimas", detalla el informe.
Los sindicatos europeos destacaron que este tipo de medidas permiten que las víctimas logren mantener una independencia financiera y conserven su puesto de trabajo pese a su situación personal.

En este sentido, el informe destaca que los sindicatos españoles han logrado que la mayoría de convenios de negociación colectiva, protocolos contra el acoso y planes de igualdad laboral incluyan cláusulas respecto a la violencia doméstica.
En particular, la CES señala casos como el convenio de la cadena de supermercados LIDL, que ofrece una baja extraordinaria de hasta tres años para víctimas de violencia machista, con el derecho a reincorporarse al mismo nivel laboral en el que se encontraban al inicio de la baja.

La empresa española que más destaca a la hora de dar ayuda a las víctimas de violencia machista es, según el informe, la eléctrica Endesa, que compensa con el 50 % de los gastos de alquiler en el caso de que la víctima tenga que cambiar de vivienda para alejarse de su agresor.
La secretaria confederal de la CES, Montserrat Mir, celebró que España sea "uno de los países pioneros en la lucha contra la violencia de género" gracias a sus protocolos de identificación de las víctimas, si bien advirtió de que la crisis económica ha afectado "seriamente" a los presupuestos destinados a la lucha contra este fenómeno.

No diría que la crisis ha hecho aumentar los casos, pero sí que la falta de presupuesto ha reducido la protección a las víctimas", lamentó Mir en declaraciones a Efe.
Así, el informe de la CES recomienda al Gobierno que "acabe con los recortes de austeridad a los servicios y recursos que tienen el objetivo de combatir la violencia doméstica" y pide una mejora de "la eficiencia y la cantidad de la cantidad del apoyo social" del que disponen las mujeres.
"Esto quiere decir más dedicación de recursos, de apoyo a las víctimas y más estructuras físicas que den apoyo haya o no demanda de ayuda", explicó la secretaria.

El documento propone además que se fomente la contratación de víctimas reconocidas de la violencia machista, tanto a nivel nacional como de las Comunidades Autónomas, y que se tenga en cuenta esta condición a la hora de establecer criterios para diversos programas de formación y servicios de empleo.
En el ámbito laboral, el CES insta también a que las situaciones que se derivan de la violencia machista, como las ausencias o las bajas médicas, no causen "perjuicio económico" a las trabajadoras afectadas.
"En una sociedad del siglo XXI no podemos permitir que haya tantas víctimas, que la mitad de la población actúe en contra de la otra mitad", alertó Mir, que destacó el papel de la educación durante la infancia y juventud "para que en un futuro estos ciudadanos sean una parte activa de la lucha contra la violencia de género"