Reino Unido, dispuesto a no cortar todos los lazos con la Justicia europea tras el Br

El Gobierno británico, a través de unos documentos publicados hoy previos a la próxima ronda de negociaciones con la UE, está dispuesto a dejar la puerta abierta a que Reino Unido siga bajo el control directo del Tribunal de Justicia de la Unión Europea incluso años después de que el Brexit sea consumado. Se trata de unos documentos de debate que en ningún caso tratan sobre la posición fijada del Gobierno británico. Esto quiere decir que el país británico se muestra dispuesto a seguir viéndose forzado a aceptar regulaciones de la Justicia europea en materias tan vitales como es la inmigración mientras duren las negociaciones acerca del tratado comercial entre ambas partes, situación que podría demorarse durante años.A largo plazo, la intención de los británicos parece ser querer que el TJUE solamente intervenga para arbitrar disputas una vez que el acuerdo del Brexit esté en vigor, lo que ya se ve con recelo desde las islas por la posible parcialidad del tribunal si por ejemplo se da un conflicto entre un ciudadano de la UE y la política de inmigración del Reino Unido."Lo que está absolutamente claro es que cuando dejemos la UE también abandonaremos la jurisdicción del Tribunal de Justicia de la Unión Europea", ha asegurado hace tan sólo unos minutos una Theresa May que ha querido mantenerse fiel a la idea de los brexiters de recuperar completamente el control de la justicia. "El Parlamento elaborará nuestras leyes, serán jueces británicos quienes las interpretarán y será nuestra corte suprema quien las arbitrará".Una postura muy diferente a la defendida en los documentos de debate publicados esta misma mañana y que, ante la avalancha de críticas, ya ha provocado que miembros de su Gobierno hayan tenido que salir a apuntar que todos los escenarios planteados son "hipotéticos" y que son sólo propuestas a discutir en la próxima ronda de negociaciones con la UE. Eso sí, todas contemplan únicamente posibilidades en las que el control "directo" del TJUE sea reemplazado eventualmente por un nuevo comité sobre el que Europa mantenga control "indirecto".Esta evolución en el debate interno del Gobierno británico, cada vez más abierto a la negociación con la Unión Europea como demandaban los partidarios del 'Brexit blando', ha provocado una división en el seno del propio partido conservador donde algunos partidarios del Leave ya están acusando a May de abandonar la línea dura que prometió en la última conferencia de los tories.