El Gobierno chileno desdramatizó hoy la subida de la deuda pública hasta el 25,2 % del PIB, prevista en el proyecto de presupuestos de 2017, al subrayar el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, que se trata de una propuesta "responsable".
La cifra supone el mayor nivel de deuda pública desde 1993 y la oposición derechista la ha criticado señalando que "hipoteca" el futuro del país".