El profesor de la Universidad de Berkeley, Ross Levine, afirma que los mercados de capitales no son simples casinos donde los ricos van a hacer sus apuestas, y que tal es la importancia del desarrollo del mercado que influye en el crecimiento y el dinamismo de las economías, las cuales se benefician de los servicios que esté les presta, convirtiéndolo en un actor muy importante en el desarrollo de un país. Cuando hablamos de servicios, sin lugar a duda tenemos que tener en cuenta los actores del mercado (Gobierno, Empresas, Inversionistas Institucionales, Inversionistas, Especuladores, Intermediarios, etc) y los diferentes productos que en el mercado se pueden transar (Bonos, Acciones, CFDs, Forex, Futuros, Opciones, etc.).

Si cruzáramos las variables expuestas anteriormente no solo obtendríamos diferentes beneficios para cada actor si no múltiples putos de vista con respecto a la función del mercado de capitales, pero para efectos de este escrito y dado el target para el que suelo escribir, me voy a enfocar en la especulación, que es finalmente la profesión en la que me desempeño y de la cual tengo una experiencia tangible, ya que desde la especulación el mercado de capitales, en mi concepto, es casi idéntico a un casino. Pero antes de entrar en una comparación estrecha debemos aclarar algunos conceptos y terminar con algunas ideas o mitos que las personas tienen sobre los casinos. En primera instancia hay que hablar sobre la "suerte" ya que se cree que los casinos son un negocio de azar, sin embargo, devengan ingresos constantes para sus dueños, esto sucede porque ningún inversionista debería dejar el destino de su dinero al azar, y los accionistas de los casinos saben muy bien esto, razón por la cual todos los juegos tienen reglas que inclinan la probabilidad a favor del negocio, es decir, que los casinos siempre ganan más de lo que pierden, sin esto simplemente, el "azar", no sería un negocio y nadie invertiría en él. Por otro lado está el apostador que como individuo simplemente asume la perdida en función de su diversión dado la adrenalina que la incertidumbre del juego le ofrece, en algunos casos se convierte en una adicción y la bancarrota será su destino ya sea en el corto o en el largo plazo y si una que otra vez gana, la mayoría de las veces retornará al casino a apostar, perder sus utilidades y posiblemente su capital.

Hasta aquí tenemos una vaga idea para entender la esencia de un casino, en resumen es un negocio de probabilidades que se inclina a favor del inversionista y en contra del apostador. A pesar de la simplicidad de este concepto es más que suficiente para entender su similitud con el mercado. En primer lugar el casino es un negocio de roles (casino-apostador) así como el mercado (al inicio de este texto definí dichos roles como actores), entre los actores del mercado, sin lugar a dudas encontraremos algunos que cuentan con la probabilidad a favor y algunos en contra, pero para el caso específico de la especulación es importante entender que la probabilidad está en contra es decir, que los traders sin buying power para mover precios, comprar empresas, emitir bonos, acciones, etc. son los apostadores del mercado y por eso el 90% de los especuladores pierden su dinero en la bolsa de valores. ¿Por qué el porcentaje de perdedores es tan alto? Múltiples factores intervienen en esto proceso y dado su amplitud será motivo de discusión en otro escrito, ya que lo importante no es entender cómo perder sino como ganar dinero en el mercado de valores.

Hasta aquí tenemos una comparación muy simple entre el mercado y los casinos de la cuál inferimos que en esencia son similares, y según nuestra comparación identificamos nuestro rol en el mercado en función del casino, es decir, los especuladores son apostadores y si esté es el caso ¿Vale la pena invertir nuestro dinero en el mercado de valores? Por supuesto que sí, pero bajo ciertas condiciones y para esto volvemos al casino... ¿Quiénes tienen los beneficios constantes en este negocio? Los dueños... ¿Cómo obtienen estos beneficios? Inclinando la probabilidad a su favor y esta es la esencia del éxito de un trader: "una estrategia que coloque la probabilidad a su favor", no es más, pero tampoco es menos, porque básicamente y tomando como referencia la analogía entre el mercado y un casino, el trading puede ser un juego o un negocio, uno puede pensar como dueño o simplemente ser un apostador y el éxito en esta profesión sin lugar a duda dependerá de la visión que cada uno de nosotros tiene del mercado, y lo que dicha visión nos empuje a realizar en función de nuestra diversión o en función de nuestro negocio, porque el apostador responde de manera emergente al mercado en función de las emociones que este le produce, mientras que el dueño de un negocio lo hace de manera deliberada, a través de planeación, investigación, diseño de estrategias y la prueba de las mismas, cuyo único fin será invertir la probabilidad, desafiar las estadísticas y así lograr vivir del trading.