La escasez de mujeres entre los candidatos a ocupar altos cargos en la Unión Europea (UE) complica el puzzle que los Veintiocho deben completar el 16 de julio en una cumbre extraordinaria de jefes de Estado y Gobierno.
Solo tres de los Veintiocho países de la UE han anunciado públicamente sus planes de presentar a una mujer para sus puestos de influencia en Bruselas, pese a que la Comisión Europea (CE) insiste en la igualdad en los puestos directivos, promoviendo incluso cuotas de género del 40 % en los consejos de administración de las grandes empresas.
"En el reparto de altos cargos en la Unión para los próximos cinco años el factor del género se ha convertido en clave", dijo a Efe el politólogo del Center for European Policy Studies (CEPS), Marco Incerti.
"Resulta muy difícil imaginar que el Parlamento Europeo (PE) respalde en otoño un colegio de comisarios con menos mujeres que el actual" con nueve, señaló el experto.
Esta semana las comisarias europeas del Ejecutivo que conformó en 2009 José Manuel Durao Barroso enviaron una carta al candidato de los líderes europeos a presidir la próxima CE, Jean-Claude Juncker, para que su Comisión tenga "al menos" diez comisarias.