A menudo en el trading hablamos de porcentaje de acierto y porcentaje de fallo. Y si bien es verdad que tanto una operación mala como una operación en pérdidas suelen ir al conjunto de operaciones que introducimos en el porcentaje de fallos no son lo mismo. Si sabéis de que os hablo entonces habréis dado un paso tan grande como el que di yo en su día. Ese gran paso no significa llegar a ser consistente sino encontrar el sendero adecuado que te irá señalando como llegar a tu objetivo de trader consistente.

¿Qué es una operación mala?

Una operación mala, al contrario que muchos traders creen, no es una operación que acaba en pérdidas aunque la mayoría de veces suele hacerlo. Una trade mala es una trade en la que independientemente del resultado de la posición se ejecuta mal el plan. Tanto cuando abres como cuando cierras una operación debes preguntarte ¿He ejecutado el plan/sistema/idea tal y como había previsto en mi estudio/reglas/análisis? Si la respuesta es sí, entonces introduce esa operación en el conjunto de operaciones buenas. Si por el contrario no ejecutaste tu plan/sistema/idea de forma correcta incluye la operación en el conjunto de operaciones malas. Llegados a este punto debemos distinguir a su vez dos pares de conjuntos. Operaciones acertadas y fallidas, y operaciones buenas y malas. Lo que determina el resultado de tu sistema es el segundo par, mientras que lo que dicta tu resultado como trader es el primer par.

¿Qué es una operación fallida?

Una operación fallida es una operación que termina en pérdidas pero no necesariamente porque se hayan hecho las cosas mal. Muchas veces tenemos pérdidas y hacemos las cosas fantásticamente bien pero bajo la premisa de que, afortunadamente para nosotros los especuladores, aún no se ha encontrado el santo grial debemos entender que estas operaciones existen aunque no venda escribir sobre ellas, aunque no interese hablarnos de ellas. En esta ocasión utilizaremos el mismo baremo que en el caso anterior. Apuntaremos independientemente del resultado si la operación fallida forma parte de las operaciones buenas o malas y tan solo después de eso si fue ganadora o perdedora. Ganadora digo porque aunque no suele ocurrir a menudo puede que una operación mala salga bien. En este sentido debemos ser honestos con nosotros mismos. Solo de esta manera podremos mejorar. ¿De qué sirve engañarse a sí mismo?