La agencia venezolana de desarrollo de videojuegos 3D Avenue lanzó al mercado su más reciente título para Nintendo Switch, PlayStation 4 y Xbox One. Se trata de “Spectrum”, uno de los pocos juegos con sello venezolano que los gamers del mundo entero pueden disfrutar y que ya está disponible para descargar de forma digital en la consola de tu preferencia.
Spectrum es un juego de plataforma con una estética minimalista, ambientado en un mundo abstracto, en donde el jugador controla una entidad oscura que intenta llegar a los portales en cada nivel, mientras evita los objetos coloridos que encuentra en su camino. Sus creadores lo hicieron inspirados principalmente en los clásicos juegos de Nintendo Entertainment System (NES),
“La idea surge de unos tests técnicos realizados por uno de los integrantes de nuestro equipo, probando la tecnología de Unity3D. Inmediatamente vimos potencial para crear un juego completamente nuevo. El juego tiene mucha inspiración en videojuegos clásicos de la era del NES como Súper Mario Bros y Mega Man; pero también tiene mucha inspiración de juegos Indie como Super Meat Boy y VVVVVV entre otros”, dijo en nota de prensa Santiago Salcedo, lead game designer y Co-founder de 3D Avenue.
Por su parte, su socio David Morón, aseguró que Spectrum nace de unos experimentos donde probaron controles con acelerómetro para mover al personaje; es decir, inclinando el teléfono. “Esto nos gustó y de allí pasamos a seguir implementando otras mecánicas como el salto y otras cosas como la estética minimalista”, explicó Morón.
El arte del videojuego toma inspiración de distintas fuentes, desde el diseño arquitectónico de Eduardo Arroyo, pasando por los icónicos diagramas del metro de Nueva York realizados por Massimo Vignelli, y hasta de las formaciones rocosas hexagonales de Irlanda, que le dan un toque único a las figuras abstractas que componen el colorido mundo de Spectrum, el cual está además ambientado con una música hipnotizante que, en suma, lo convierten en un juego genial para los amantes de los juegos de plataformas.