El par de divisas que mejor actuación ha ofrecido hoy ha sido el USD/JPY, que ha interrumpido su racha de cinco días de consolidación hasta situarse por encima de 113,50. Una serie de factores contribuyeron a estos movimientos pero el principal motor fue el aluvión de ventas del Black Friday. Según Adobe (NASDAQ:ADBE) Analytics, que rastrea las transacciones de 80 de las 100 mayores minoristas de internet, las ventas online registraron máximos históricos en 6.220 millones de dólares el viernes, un 23.6% más que el año pasado, mientras que Mastercard (NYSE:MA) prevé que el total de ventas superará los 23.000 millones de dólares. Adobe espera que los consumidores a gastar otros 7.800 millones de dólares durante el Ciberlunes, lo que representaría una enorme subida del 18% con respecto a los niveles del año pasado. Como este evento de sólo un día se acaba convirtiendo en un fenómeno de ventas de una semana entera, las minoristas han hecho un gran trabajo manteniendo interesados a los consumidores. Con estas cifras podríamos estar presenciando una recuperación del sector menorista muy buena no sólo para las acciones, sino también para las divisas. La subida del 1,5% del S&P 500 junto con el aumento del rendimiento de los bonos del Tesoro también contribuyeron a la subida del USD/JPY.
El par de divisas ha vuelto hacia la SMA de 20 días, el impulso vuelve ser al alza y el USD/JPY va camino del nivel de 114. Estados Unidos no ha publicado informes económicos de relevancia pero este martes se publican los precios de la vivienda y las cifras de confianza de los consumidores, aunque desafortunadamente no creemos que ninguno de estos informes ayude al dólar porque las acciones han descendido bruscamente este mes.
Además, el presidente Trump no va a la reunión del G20 con optimismo. Ha comunicado al Wall Street Journal que es muy poco probable se pospongan la imposición de más aranceles a China. No sólo se espera que sigan adelante con los aranceles del 25% sobre 200.000 millones de dólares en productos chinos sino que el presidente ha sugerido incluso que los iPhones y portátiles importados de China podrían estar sujetos a aranceles del 10%. Nunca hemos sido muy optimistas en cuanto a la reunión entre Trump y Xi y estos últimos comentarios del presidente de Estados Unidos refuerzan nuestra opinión de que no habrá ningún avance significativo en las próximas conversaciones y, si estamos en lo cierto, el aumento de las tensiones comerciales le pondrán muy difícil al USD/JPY conservar sus ganancias. Tras estas declaraciones, no debería ser ninguna sorpresa que los dólares australiano y neozelandés hayan sido las divisas que peor actuación han ofrecido. Aunque el dólar australiano descendió más que el dólar neozelandés, las ventas minoristas de Nueva Zelanda fueron muy decepcionantes —los economistas habían esperado un aumento del 1% en las ventas minoristas del 3T pero en cambio el gasto se ha estancado. En cuanto al dólar canadiense, la subida del billete verde impidió que reaccionara a la recuperación de los precios del petróleo.
Mientras tanto el EUR/USD registró mínimos de seis días tras el fortalecimiento del dólar y las prudentes declaraciones del BCE sobre el comercio. Según el presidente del BCE, Mario Draghi, los últimos datos económicos han sido más débiles de lo esperado y aunque parte de la ralentización podría ser temporal, la persistente incertidumbre llama a la paciencia. Estas preocupaciones se vieron alimentadas por el descenso de la confianza empresarial indicada en el informe del IFO. Draghi considera que el impulso del crecimiento mundial se ha ralentizado considerablemente y aunque la inflación ha subido, se espera que descienda en los próximos meses. Aun se espera que el banco central pondrá fin a las compras de bonos en diciembre pero el uso de las palabras "en este momento" para describir sus planes de detener la compra de bonos ha planteado cierta preocupación en torno a que pudieran replanteárselo si la economía mundial se debilita sustancialmente en las próximas semanas. Ya no esperamos ninguna sorpresa en los mercados financieros antes de la reunión de política monetaria del 13 de diciembre, de manera que el BCE debería seguir adelante con lo previsto pero todos los indicios apuntan a una orientación prospectiva prudente y unas discretas revisiones económicas. Las preocupaciones del BCE han eclipsado los informes que indican que Italia podría estar dispuesta a adaptar sus objetivos de déficit fiscal a las exigencias de la UE. El EUR/USD cerró la jornada en mínimos, así que parece probable que alcance el nivel de 1,13.
Líderes de la UE han aprobado el acuerdo de salida del Brexit pero en vez de subir, la libra cerró la jornada sin cambios porque los inversores saben que el gran reto ahora está en el Parlamento. La primera ministra May necesita 320 votos para aprobar el acuerdo de Brexit y hay 650 escaños en el Parlamento. Debe contar al menos con 316 votos conservadores pero apenas hay ninguna posibilidad de que consiga alguno de los 10 votos de DUP así que su trabajo va a ser convencer a los miembros del partido laborista de la oposición para que apoyen su acuerdo. Será una ardua tarea porque los laboristas creen que la mayoría de sus miembros rechazarán su acuerdo pero hay laboristas rebeldes y partidarios del Brexit a los que se podría persuadir. El Parlamento votará el acuerdo el 11 de diciembre así que hasta entonces, es muy probable que la libra se mueva en un estrecho rango mientras los escépticos aguardan el resultado final.