Las vacaciones a dos suponen una dura prueba hasta para las parejas más sólidas. Disfrutar de los momentos juntos y respetar las necesidades individuales son las claves del éxito
Dicen que muchas separaciones vienen después de pasar unas vacaciones juntos. Quizá parezca mentira, pero viajar en pareja a veces no es tan sencillo. Las primeras escapadas son un simulacro de la convivencia, si aun no lo hacéis. Y da igual que hayáis empezado a salir hace poco o que ya llevéis años juntos, que viajéis cerca o hayais elegido un destino exótico, pasar veinticuatro horas al día mano a mano puede ser más difícil de lo que parece. Te damos las claves para superar con nota esta prueba de fuego.
Cinco consejos para viajar en pareja
La elección del destino es crucial y requiere de una charla previa y sincera. Influirán factores como el tiempo, el presupuesto y vuestros gustos, pero se trata de buscar un lugar versátil que ofrezca atractivos para los dos. Si él es un amante del campo y a ti no te emociona, buscad un alojamiento rural que tenga un buen spa, donde puedas hacerte algún tratamiento facial para darte un capricho. ¡Se trata de que las dos partes disfruten!
Las cuentas claras. Trata de fijar de antemano el presupuesto y cómo lo vais a financiar. Puede que a uno le encante la nieve pero el sueldo del otro no llegue para una escapada a los Alpes. Quizá el menos boyante pueda pagar su transporte y compartir gastos, mientras que la otra parte se ocupará también del alojamiento. Llevarlo hablado minimizará los roces en el destino y permitirá que los dos disfrutéis de viajar en pareja.
Respetar los ritmos de cada uno. Una de las partes más complicadas, pero que es el reflejo del día a día de la pareja. Puede que al llegar el fin de semana uno de los dos prefiera dormir hasta tarde, y el otro no pueda perderse el bufet del desayuno. Asumir que cada uno tiene unos ritmos, gustos y costumbres es más sencillo que intentar cambiarlo, llevar a la persona a rastras y no disfrutar ninguno. Aprovecha ese momento para leer mientras te tomas el primer café de la mañana o hacer un poco de ejercicio, y disfruta también de estos momentos de las vacaciones contigo mismo.
Tiempo para todo. Los viajes turísticos pueden resultar cansados, sobre todo si se viaja en pareja y no se para en todo el día. Si vais a estar fuera del hotel toda la jornada, planea una parada a media tarde en un sitio bonito, donde podáis descansar un poco y retomar fuerzas para seguir con el resto del día. Siempre hay alguien con más energía, pero no se trata de llevar a tu pareja agotada…
Aprovecha las fortalezas. Si uno de los dos es súper tecky, puede bajarse de antemano todas las apps de mapas, transportes o restaurantes locales. El loco de Instagram de la pareja puede rastrear los sitios más cool. Pero, ojo, no vale enfadarse cuando uno no acierta… Perderse o comer mal y caro en el sitio más de moda es parte de la aventura…
Y no os olvidéis de retratar el momento. Selfies, posados con el remoto de la cámara o la clásica foto que nos hace un desconocido enfrente de algún monumento. Un último consejo: los turistas orientales siempre aciertan, así que busca alguno para tener el mejor recuerdo. Y vosotros, ¿creéis que es posible disfrutar de viajar en pareja?