El precio del cobre tocó este jueves un máximo de siete semanas por una bajada del dólar luego de que la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) señaló que sería paciente, pero las ganancias se vieron limitadas por una baja de la actividad del sector manufacturero de China.

El cobre en la Bolsa de Metales de Londres (LME) subía un 0,6%, a US$6,175 la tonelada, a las 1118 GMT. El metal, que se usa en energía y construcción, tocó antes los US$6.182 por tonelada, su nivel más alto desde el 13 de diciembre.

"El cobre al final se mueve por el crecimiento de la producción económica e industrial de China, donde los indicadores adelantados como el crecimiento del crédito y la inversión de capital se están desacelerando", dijo el analista de Liberum Richard Knights.

La FED dejó las tasas de interés sin cambios el miércoles y retiró su compromiso de "nuevos aumentos graduales". El presidente de la institución, Jerome Powell, dijo que los argumentos para un alza de tasas se habían "debilitado" en las últimas semanas.

La cautela de la FED pesaba sobre la moneda estadounidense, que cuando cae hace que los activos que se negocian en dólares sean más baratos para los compradores en otras monedas.

El sector de manufacturas de China se contrajo por segundo mes consecutivo en enero. Pese a los esfuerzos del gobierno para estimular la actividad, crece la preocupación de que China pueda enfrentar una desaceleración mayor a la esperada si se prolonga la guerra comercial con Estados Unidos.

El níquel subía un 0,5% a US$12.410 por tonelada, tras tocar un máximo de tres meses de US$12.465.

Respecto a otros metales, el zinc ganaba un 1% a US$2.714 por tonelada; el aluminio perdía un 0,3% a US$1.904; el plomo avanzaba un 0,3% a US$2.096; y el estaño ganaba un 0,3% a US$20.870.