Nada parece frenar al mercado del oro, aun cuando los especuladores están dando un paso atrás. El lingote se ha disparado y los futuros registraron la semana pasada el mayor avance en dos meses. Los fondos de cobertura se perdieron la fiesta, ya que redujeron sus apuestas a un aumento en la mayor medida desde que se volvieron alcistas en enero.