Para nadie es un secreto que toda Latinoamérica estuvo implicada en este caso y parece ser que Keiko es una más. Actualmente se encuentra detenida en una cárcel de Lima desde hace 5 meses y se negó hoy a declarar ante la fiscalía en la investigación por presunto lavado de activos provenientes de la brasileña Odebrecht. Estas fueron sus palabras:
Según ella el fiscal que lleva el caso ha perdido la objetividad“Es su derecho guardar silencio o abstenerse a declarar, y se tiene que respetar”,
dijo en su cuenta de Twitter.“Después de vivir en carne propia los abusos y excesos, producto de la ausencia de justicia, he tomado la decisión de hacer valer mi derecho de guardar silencio frente a un fiscal que, en mi caso, ha perdido totalmente la objetividad”,