EURUSD rompió el piso alrededor de 1.0925 y estiró el patrón descendente de cuatro meses a un nuevo mínimo de 28 meses de 1.0904 el viernes.
Según los indicadores técnicos, el par sigue expuesto a riesgos a la baja en el corto plazo dada la pendiente negativa en el RSI y la caída de los estocásticos, que aún no han confirmado las condiciones de sobreventa.