En el panorama general, la disminución de 0.8135 (máximo de 2018) se ve como una reanudación de la tendencia a la baja a largo plazo desde 1.1079 (máximo de 2011). El siguiente objetivo es 0.6008 (mínimo de 2008). Por el lado positivo, se necesita romper la resistencia de 0.7082 para ser el primer signo de tocar fondo a mediano plazo. De lo contrario, la perspectiva seguirá siendo bajista incluso en caso de un fuerte rebote.