Alivio momentáneo para las autoridades japonesas, poco acostumbradas a buenas noticias en lo que se refiere al desempeño económico del país asiático. El Producto Interior Bruto (PIB) nipón creció un 0,5% en el tercer trimestre del año en comparación con los tres meses anteriores, una tasa por encima del 0,2% esperado por los analistas. No obstante, los datos preliminares facilitados por el Gobierno japonés muestran la debilidad de este repunte, causado por el aumento de las ventas al exterior y no por la fortaleza del consumo interno.