Los datos publicados antes del evento apoyan las fuertes cifras del NFP, ya que la encuesta ADP mostró que el sector privado agregó 204.000 nuevos empleos en abril, mejor que los 200.000 previstos, mientras que el informe semanal de peticiones por desempleo mostró que la media de 4 semanas fue de 221.500 peticiones, una disminución de 7.750 de la semana anterior desde 229.250. Este es el nivel más bajo para este dato desde el 3 de marzo de 1973, cuando fue de 221.250. El informe Challenger Jobs Cut también está apoyando una menor tasa de desempleo, ya que mostró que los recortes cayeron un 40.2% en abril con respecto al mes anterior.
Aún así, los datos de los salarios no fueron tan alentadores. Durante el primer trimestre de 2018, los costes laborales unitarios en el sector empresarial no agrícola aumentaron un 2.7%, por debajo de las expectativas del mercado de un 2.9%. La lectura del trimestre anterior fue revisada a la baja al 2.1%.
En definitiva, el informe de nóminas no agrícolas tiene pocas posibilidades de impulsar la recuperación del dólar por sí mismo, especialmente si los salarios muestran el crecimiento modesto previsto. La reacción de los rendimientos de los bonos y las acciones tendrá la última palabra en el movimiento potencial del dólar después de la publicación.