El EUR/USD ha marcado un mínimo de aproximadamente 28 meses en la sesión asiática del viernes y ha llegado a una zona de soporte de gran relevancia. La reacción del precio en la región de los 1.0900 podría determinar la trayectoria de corto plazo del par más líquido del mundo.
El EUR/GBP ha rebotado desde el soporte psicológico de los 0.8800 y ha recuperado la media móvil de 200 días con convicción, una señal positiva según el análisis técnico. Desde aquí no se descarta un movimiento decisivo hacia los 0.8900.