Esto principalmente por el éxodo de extranjeros que decidieron dejar el país por la crisis y la alta tasa de desempleo



La salida de extranjeros de España durante el año 2013 hizo que la población del país, asolado por una crisis que dura ya un lustro, se reduzca por segundo año consecutivo.

Según los datos provisionales publicados hoy por el Instituto Nacional de Estadística, España tenía a finales del año pasado 46,7 habitantes, 404.619 menos que al comienzo del ejercicio.

En total, 545.980 extranjeros abandonaron el país, principalmente por la crisis y la alta tasa de desempleo, del 26 por ciento. Por contra, fueron 141.361 los españoles que decidieron volver.

Por nacionalidades, solo creció el número de ciudadanos chinos (un 2,0 por ciento), mientras que el resto de colectivos se redujo, especialmente el de aquellos de origen inglés (22 por ciento), rumano (8,0%) y ecuatoriano (17%).

Según los últimos datos, el 10,7 por ciento de los habitantes de España tiene nacionalidad extranjera.

Desde que en 1998 se comenzaron a publicar en España las cifras de población, ésta aumentó año tras año debido principalmente a la inscripción de ciudadanos extranjeros, cuya cifra pasó de 923.879 en el año 2000 a 5,7 en 2010.

En 2012, se invirtió por primera vez esta tendencia, que continuó en 2013 con un mayor descenso.