Una vez que determina cuánto está dispuesto a perder en una operación, su próximo paso es definir cuándo entrará y saldrá de una operación para obtener la mayor ganancia.

Algunas personas prefieren entrar tan pronto como todos sus indicadores coincidan y ofrezcan una buena señal, aun si la vela japonesa no ha cerrado. A otros les gusta esperar hasta el cierre de la vela.

En realidad todo esto se trata de un estilo de realizar las operaciones. Algunas personas son más agresivas que otras y usted eventualmente descubrirá qué tipo de operador es.

Para las salidas, usted tiene algunas opciones diferentes. Una manera es arrastrar su stop. Lo que significa que si el precio se mueve a su favor por una cantidad ‘X’, usted mueve su stop por esa cantidad ‘X’.

Hay que tener muy claro que es un stop loss, para que sirve y cómo funciona, tenemos que entender que un stop loss no debe ser utilizado para “sacarnos rápido de una perdida”, más bien debe utilizarse para “cortar las pérdidas a tiempo”, esto requiere un buen análisis para poder también diferenciar en el momento donde el precio del mercado este en una oscilación del mercado o un movimiento que pueda poner en duda la conjetura de la operación.

Otra manera de salir es tener un precio objetivo, y salir cuando el precio llega a ese límite. El modo de calcular el objetivo depende de usted. Algunas personas eligen los niveles de soporte y resistencia como sus objetivos. Otros simplemente eligen ir por la misma cantidad de dígitos en cada operación. Sin embargo usted toma la decisión de calcular su objetivo, simplemente asegúrese de adherirse al mismo. Nunca se retire antes, sin importar lo que suceda. ¡No se aleje de su sistema! Después de todo, ¡USTED lo creó!

Otra forma de salir es hacer uso de un conjunto de criterios que, en caso de cumplirse, le indicarían que se retire. Por ejemplo, usted puede tener como regla que, si sus indicadores cambian hasta llegar a un determinado nivel, usted se retira de la operación.