El par tiene un fuerte soporte alrededor de 1.0710, y necesitará un quiebre por debajo de él para confirmar un máximo provisional y favorecer un movimiento hacia abajo hacia 1.0635, mientras que por debajo de este último, el próximo soporte relevante viene en 1.0565, aunque la debilidad actual del dólar hace improbable una caída hacia esta última semana.