Cuando éramos niños sabíamos que si llevábamos un suspenso a casa, nuestros padres nos regañarían o castigarían, de jóvenes nos da vergüenza decir que nos había ido mal, que quizá nos equivocamos al escoger nuestra carrera profesional, etc. Aceptémoslo, tendemos a intentar que nadie se entere si nos cuesta conseguir dinero o un mejor empleo. Más aún, la depresión nos cae de lleno, cuando alguien nos pregunta que estamos haciendo para remediar la mala situación. ¿A que se debe esto? NO hemos aprendido a aceptar el fracaso.
¿Nadie ve con buenos ojos a aquel que dice haber fracasado? Pues no, alguien lo pensaría muchas veces antes de darle su dinero a un gestor de cuentas que dice haber perdido miles o millones de dólares anteriormente, un banco dificilmente daría crédito a una persona con malos antecedentes crediticios, por tanto. Así pues podemos y debemos considerar un gran mérito cuando alguien se levanta tras un problema .
Los traders debemos compartir nuestros fracasos, no solo para aprender de las experiencias y opiniones de otros sino también para darle valor al fracaso como un resultado tan legítimo como el éxito. Solo partiendo de la aceptación de nuestros propios fracasos y errores, podremos fortalecer nuestras debilidades y potenciar aún más nuestras fortalezas. Recuerde que el fracaso es el condimento que da sabor al éxito.
Usted puede estar viviendo tranquilo en este momento, sin saber que esta fracasando a diario por no tomar decisiones HOY y postergarlas para unos meses más, por creer que no es el mejor momento AHORA. Aprendamos a equivocarnos, aprendamos a aprender.