La economía española, que afianzó su recuperación entre enero y marzo con un crecimiento del 0,4 %, pasará a un ritmo del 0,5 % en los otros tres trimestres de este año, de forma que en 2014 el incremento de la actividad será del 1,3 %, según el Instituto Nacional de Estadística de Francia (INSEE).

La progresión del producto interior bruto (PIB) de España este ejercicio será así superior al 1 % del conjunto de la zona euro, indicó el INSEE en su nota trimestral de coyuntura, que incluye varios capítulos de los principales países de la moneda única.
El vector de la recuperación española en 2014 será el consumo privado, que aumentará un 2 %, mientras que la inversión permanecerá casi estancada (0,1 %) y el comercio exterior tendrá un impacto negativo, por el tirón del 4,7 % de las importaciones, mientras las exportaciones subirán a una cadencia inferior, del 3,5 %.
Los autores del informe hicieron notar que mientras las encuestas avanzan "un crecimiento significativo de la actividad en los servicios y en la industria manufacturera", el contrapunto es la construcción, que se mantiene a "un nivel muy bajo" porque sigue "sufriendo el ajuste del mercado inmobiliario" que "todavía frena la recuperación de la economía española".
También señalaron que el empleo se estabilizará en el primer semestre antes de progresar en el segundo.
Por eso, el ascenso del consumo privado hay que relacionarlo con el primer alza del poder adquisitivo entre el segundo y el cuarto trimestre tras cuatro años de "claro retroceso", gracias a la subida de los salarios en un contexto de inflación "muy débil".