Hay líneas limítrofes que molestan a muchos países. Google se las ha ingeniado para tratar de no incordiar a los usuarios o autoridades
Un equipo compuesto por un investigador del New York Times, un editor gráfico de la Radio Nacional Pública estadounidense, un desarrolladores de Medium y un editor gráfico de Fast Company han descubierto cómo Google cambia las líneas limítrofes entre algunos países, según esté el usuario que mira Google Maps.
Dibujar las fronteras entre países es un tema delicado y lo más común es que alguien se moleste. Google ya ha sufrido algunos tirones de orejas de algunos Gobiernos por colocar nombres incorrectos o atribuir alguna región a algún país. De hecho, para evitarse molestias, en Google Maps hay 32 países a los que ha preferido no dibujarle la línea fronteriza.
El equipo de investigación ha escrito un software que compara las fronteras en Google Maps de forma automática, las coloca en una web y ubica las diferencias. Se percataron que esas líneas se ven diferentes dependiendo del lugar del mundo en que esté el usuario.
Por ejemplo, muestran Arunachal Pradesh, una región administrada por India pero que el Tíbet reclama como propio. A esto se le suma que China considera que el Tíbet le pertenece. La zona, si se observa desde India, se verá como un territorio indio, pero como parte de China si se observan los mapas en suelo chino. Si está en los Estados Unidos, lo verá con una línea punteada, sin frontera definida.
Un caso más reciente de territorio dividido, Crimea. Según dónde se mire, habrá una línea divisoria o se pondrá una línea punteada. Si se ve desde Rusia, la región estará cortado por una clara línea negra, pero si se ve desde Ucrania, se coloca una delgada línea. Hay muchos más casos retratado en la página dónde han publicado su documentación llamada «Disputed Territories».