No hay informes importantes de la zona euro para el resto de la semana, por lo que cualquier gran movimiento podría ser el resultado de la acción del dólar. Las cifras del IPC y las ventas minoristas de EE. UU. Se publicarán más adelante en la semana, lo que podría significar más volatilidad para este par en ese momento.
Está previsto que el IPC general publique un repunte del 0,3%, más lento que el anterior aumento del 0,6%, mientras que la versión básica podría experimentar otro aumento del 0,2%. Los resultados más fuertes de lo esperado podrían significar cierto apoyo para el dólar, aunque los operadores podrían querer esperar a los datos de gasto del consumidor.
Las ventas minoristas generales podrían mostrar un aumento del 1,9%, menor que el aumento anterior del 7,5%, mientras que la lectura básica podría ver un aumento del 1,3%. Los datos pesimistas, sin embargo, podrían significar pérdidas en dólares, ya que podrían provocar una mayor flexibilización de la Fed.
No hay informes importantes de la zona euro para el resto de la semana, por lo que cualquier gran movimiento podría ser el resultado de la acción del dólar. Las cifras del IPC y las ventas minoristas de EE. UU. Se publicarán más adelante en la semana, lo que podría significar más volatilidad para este par en ese momento.
Está previsto que el IPC general publique un repunte del 0,3%, más lento que el anterior aumento del 0,6%, mientras que la versión básica podría experimentar otro aumento del 0,2%. Los resultados más fuertes de lo esperado podrían significar cierto apoyo para el dólar, aunque los operadores podrían querer esperar a los datos de gasto del consumidor.
Las ventas minoristas generales podrían mostrar un aumento del 1,9%, menor que el aumento anterior del 7,5%, mientras que la lectura básica podría ver un aumento del 1,3%. Los datos pesimistas, sin embargo, podrían significar pérdidas en dólares, ya que podrían provocar una mayor flexibilización de la Fed.