El primer día en el que Cuba aplica las nuevas medidas aduaneras transcurrió con normalidad y con mensajes de conformismo entre los viajeros que llegaban hoy en vuelos a la isla, un ambiente que contrasta con el clima de malestar local y las críticas que cosecharon estas normas en algunos medios cubanos.
"Todo bien. Sin problemas" era la respuesta más habitual esta mañana entre los pasajeros que llegaban en los primeros vuelos charter desde Miami, la mayoría de ellos cubanos residentes en EE.UU., que viajan a la isla con cierta frecuencia y generalmente cargados de regalos para sus familiares.
Cuba aplicó hoy nuevas medidas aduaneras que imponen nuevas restricciones para los viajeros en la entrada de bienes al país, normas que han sido vistas por muchos ciudadanos cubanos como un obstáculo más en la difícil tarea de adquirir en la isla artículos como ropa, productos de aseo o electrodomésticos.
Se trata de una de las medidas del Gobierno de Raúl Castro más polémicas y contestadas de los últimos años y que ha levantado críticas incluso desde la propia prensa oficial, que en la última semana dedicó numerosos artículos al asunto, al considerar esta norma desproporcionada y alejada de la realidad.