La Comisión Europea (CE) finalmente autorizó este viernes la compra del popular servicio de mensajería móvil WhatsApp por parte de la red social Facebook, en una operación de 19.000 millones de dólares.
La Comisión tomó la decisión luego de comprobar que los ciudadanos todavía tendrán una gran variedad de empresas para comunicarse, y que este cambio no obstaculizará la libre competencia en dicho sector.
“Las aplicaciones de comunicaciones móviles (…) tienen cada vez más éxito. Y aunque Facebook Messenger y WhatsApp son dos de las aplicaciones más populares, la mayoría de la gente no utiliza una sola aplicación, sino varias”, indicó el vicepresidente de la Comisión Europea y responsable de Competencia, Joaquín Almunia.
En su investigación, la CE se centró en tres áreas: los servicios de comunicaciones entre usuarios, los servicios de redes sociales y los servicios de publicidad en línea.
En el primer punto, Bruselas consideró que WhatsApp y Facebook Messenger no son competidoras directas, dado que la primera basa su servicio en los números de teléfono, mientras que la segunda está integrada a la red social.
Además, consideraron que ambas empresas "son competidoras lejanas en el sector de redes sociales, debido a que WhatsApp ya constituye una red social competidora de Facebook, pero la de Mark Zuckerberg es una experiencia mucho más rica", oyendo la opinión de 'terceros'.
Finalmente, sobre la publicidad en línea, la Comisión indicó que no plantea problemas, aún si Facebook decidiera colocar publicidad en WhatsApp o recopile datos de los usuarios.