Además, el sector manufacturero y de servicios ha seguido funcionando bien a medida que el país reabre. Por ejemplo, los datos publicados por Markit y Australia Industry Group (AIG) mostraron que el PMI manufacturero subió a 59.7 y 61.7, respectivamente, en abril. Una cifra de PMI de 50 o más suele ser un signo de expansión.
Este crecimiento se ha visto favorecido por la reapertura y la creciente demanda de sus productos. De hecho, los precios de algunos de sus productos básicos clave, como el mineral de hierro y el carbón, se han elevado a un máximo de varios años. De hecho, el único desafío son los desafíos continuos en la industria del transporte marítimo. Más importante aún, el sector de la vivienda de Australia ha tenido un buen desempeño, con los precios de la vivienda subiendo al nivel más alto en años.
En este contexto, el RBA concluirá su reunión el martes. Los analistas de la mayoría de los corredores de CFD y forex esperan que el banco deje las tasas de interés en el 0.10%, donde han estado en los últimos meses. El banco también ampliará su control de la curva de rendimiento y sus programas de flexibilización cuantitativa. A través de QE, el banco se encuentra en la segunda fase de un programa de compra de activos de 78,000 millones de dólares.