Un récord de cinco millones de británicos tiene actualmente empleos con sueldos bajos, como consecuencia de la crisis económica, según indica un informe difundido hoy en el Reino Unido.
El estudio, realizado por el centro de estudios "The Resolution Foundation", que analiza el mercado laboral, indica que esos cinco millones cobran menos de dos tercios de la media por hora, que se calcula en 7,69 libras (9,7 euros al cambio de hoy).
La cifra, correspondiente a 2013, supone un aumento en 250.000 personas respecto al año anterior, lo que confirma la consolidación en el mercado británico de empleos mal pagados con los que apenas se puede subsistir.
Según la Fundación, el incremento refleja en parte la mayor creación de puestos de trabajo en los últimos meses, pero, advierte, existe el riesgo de que los ciudadanos queden atrapados en empleos con salarios insuficientes.
Una de cuatro personas que cobra el sueldo mínimo -de 6,5 libras la hora (8,2 euros)- lo sigue cobrando al cabo de cinco años, señala la organización, que pide al Gobierno que aborde el problema.
Según "The Resolution Foundation", los trabajadores del Reino Unido tienen más probabilidades de tener sueldos bajos que los de economías parecidas, como la de Alemania o la de Australia.
"Pese a que los últimos meses han traído buenas noticias en cuanto al acceso de la gente al mercado laboral, la estrechez de ingresos continúa", declaró el economista jefe, Matthew Whittaker.
"Aunque un sueldo bajo es mejor que no cobrar nada, es preocupante que el número de trabajadores con salarios bajos haya alcanzado un récord", añadió.
Whittaker señala que los salarios bajos crean presiones financieras a las familias, perjudican las perspectivas futuras y, por otra parte, tampoco permiten al Gobierno recaudar los impuestos que necesita, al tiempo que aumentan las peticiones de ayudas estatales.
La fundación recomienda subir el sueldo mínimo interprofesional como primera medida pero subraya que se necesita "una estrategia más amplia para sacar a cantidad de personas de la pobreza en el trabajo".
Un portavoz del ministerio de Empresa dijo a raíz del informe que la economía "se está recuperando" y aseguró que "el Gobierno quiere ayudar a todos los trabajadores a compartir los beneficios del crecimiento económico".
La portavoz laborista del Tesoro, Catherine McKinnell, en la oposición, declaró a su vez que la gente trabajadora "ha perdido 1.600 libras (2.031 euros) al año con este Gobierno y por eso la mayoría no siente la recuperación".
La secretaria general de la confederación sindical TUC, Frances O'Grady, criticó que "la mayoría de los empleos creados desde la crisis (crediticia de 2008) han sido de la variedad mal pagada, temporal y por horas".