A poco más de una semana para las elecciones presidenciales en Estados Unidos, el mercado no lo tiene nada claro.
“No descartamos que, a menos que haya una clara victoria de cualquiera de los dos candidatos (actualmente Biden aventaja en 8 puntos a Trump), el recuento podría alargarse e incluso ser el Tribunal Supremo quien tuviera que decidir ganador, en un proceso que se alargaría en el tiempo y, sin duda, traería gran volatilidad e incertidumbre a los mercados”, apuntan en Renta 4 (MC:RTA4).
De la misma opinión es John Emerson, Vice-chairman de Capital Group International. Los votos por correo podrían suscitar confusión en la jornada electoral. A menos que surja una clara victoria del presidente Trump o de Joe Biden, "el resultado de las elecciones presidenciales probablemente no se conozca en varios días o incluso semanas", afirma Emerson, mientras los estados gestionan el volumen insólito de votos por correo. "Este periodo de incertidumbre probablemente venga acompañado de altos niveles de volatilidad en los mercados", agrega.
“¿Preparado para bolsas, bonos y dólares débiles por un tiempo? Porque todo indica que esto es lo que sucederá durante las próximas semanas”, afirman en Bankinter (MC:BKT).
“Coinciden la aparentemente muy probable victoria demócrata, los crecientes problemas para controlar la expansión del virus, la suspensión temporal de la experimentación con algunas vacunas y una macro que tiene difícil mejorar desde la situación actual”, añaden estos expertos.
“Si gana Biden (que ya veremos si es así, porque esta situación recuerda a la de 2016 y Trump ganó por sorpresa), lo lógico es que las bolsas se detengan ante la probable rotación sectorial que se avecina (peor petroleras, farmas, tecnológicas… y mejor infraestructuras, constructoras…) y tomen preventivamente algunos beneficios, los bonos americanos sigan retrocediendo al aumentar las expectativas de inflación y de gasto público (¿T-Note hasta 1,00%?) y el dólar se debilite todavía más (¿1,19/1,20/€?). Y esto será pasajero o no, dependiendo de las primeras decisiones que tome Biden a partir de enero”, explican en Bankinter.
Por su parte, Jack Janasiewicz, portfolio manager en Natixis (PA:CNAT) IM, y Esty Dwek, Head of Global Market Stategy de Natixis IM Solutions (Natixis IM), coinciden en que “la posibilidad de unas elecciones inciertas en su resultado sigue siendo uno de los riesgos clave de aquí a final de año”. Sin embargo, estos expertos afirman que “es interesante observar cómo la curva de volatilidad en los mercados ha empezado a bajar”.
Según ellos, “Tal vez el mercado está poniendo lentamente en precio unas probabilidades cada vez más bajas de unas elecciones disputadas. Ahora mismo, los sondeos señalan que Biden ya tiene asegurados aproximadamente 216 votos del Colegio Electoral y necesita llegar a 270 para ganar. Esto centra la batalla en ocho o nueve Estado clave que se pueden inclinar para un lado u otro. Pero al analizarlos, Biden lleva una ventaja de más del 5% en Minnesota, Michigan; Pensilvania y Wisconsin, que suman 56 votos, con lo que ya estaría por encima de los 270 necesarios”.
“Para que Trump pueda frenar esta marea necesita ganar los otros cuatro o cinco Estados en juego y especialmente California del Norte y Florida. Precisamente en estos dos Estados, que son clave por su número de votos en el Colegio Electoral, en principio todo estará listo para ser publicado al final de la noche electoral. Por eso, las probabilidades de tener unas elecciones disputadas, en las que no se sepa cuál es el resultado, bajan aún más”, añaden los analistas de Natixis IM.