La libra esterlina subía al inicio de la sesión de trading del miércoles pero luego ha retrocedido desde el nivel en 1.33 tal y como ya habíamos visto anteriormente. En este momento es muy probable que haya una gran presión bajista en el mercado pero es obvio que uno no puede entrar en corto contra la libra esterlina durante periodos significativos de tiempo por el potencial alcista que tiene. Esta lección es algo que se suele aprender a las malas porque cuando uno analiza la economía británica ve cientos de razones que le llevan a pensar que no está en una buena situación y que la libra debería devaluarse. Sin embargo no ocurre eso y en su lugar parece que solo deberíamos entrar en una sola dirección en este par, asumiendo que la libra tiene algún tipo de salvavidas.
Teniendo en mente lo dicho creo que acabaremos viendo algún tipo de corrección de la que podremos sacar partido, tal vez si se aproxima al nivel en 1.31 que está en una zona que será muy interesante porque ahí está el inicio de un soporte significativo que se extiende hacia abajo hasta la media móvil exponencial (EMA por sus siglas en inglés) a 50 días y luego hasta el nivel en 1.30. Si las condiciones no cambian estoy convencido de que el mercado acabará moviéndose al alza pero es posible que necesitemos una leve corrección que nos permita acumular el impulso alcista necesario. Con esto en mente interpretaré una caída potencial como una oportunidad de compra más que cualquier otra cosa y en general no tengo interés en entrar en corto contra la libra esterlina porque parece que a los inversores les da igual el Brexit o un nuevo confinamiento en el Reino Unido.