La venezolana Yulimar Rojas, doble campeona mundial de triple salto, conquistó en Tokio su primer oro olímpico con un nuevo récord del mundo, 15,67 metros en su último intento, y Ana Peleteiro, su compañera de entrenamientos bajo la dirección del cubano Iván Pedroso, ganó el bronce después de batir dos veces su récord de España.
El registro de Yulimar Rojas mejora en 17 centímetros la plusmarca mundial establecida por la ucraniana Inessa Kravets el 10 de agosto de 1995 en los Mundiales de Gotemburgo (Suecia).
La portuguesa Patricia Mamona, con 15,01 en su cuarto salto, se alzó con la presea de plata y Peleteiro, batiendo su récord nacional primero con 14,77 en el segundo turno y luego con 14,87 en el quinto, se fue con el bronce