La inflación sigue siendo baja en la zona euro, a pesar de los avances a corto plazo en las cifras generales del IPC. El presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, en la reunión de política del BCE la semana pasada, señaló que aún se necesita un "amplio grado de estímulo", apuntando a "presiones de precios internos [permanecen] silenciadas" y que "la inflación subyacente aún no ha mostrado convincente hacia arriba tendencia "a justificar la paciencia del BCE con las tasas. Las cifras de inflación entrantes indican que las presiones de precios se mantuvieron sin cambios en + 1,5% a / a en octubre, tal vez lo suficiente como para evitar que el euro caiga mucho más bruscamente pero no lo suficiente como para provocar un cambio completo.