A pesar de los últimos reveses intensos frente al máximo de 2018, las perspectivas a mediano y largo plazo para este par importante siguen siendo constructivas. El retroceso es visto como nada más que una corrección saludable en esta etapa, con un mínimo más alto buscado idealmente por delante de 1.3000 para la próxima extensión alcista principal y continuación alcista.
Por otro lado, el soporte del canal de tendencia descendente, actualmente cerca de mediados de los 1.3000, podría seguir defendiendo para proteger el lado negativo inmediato, que si se rompe podría marcar un nuevo colapso bajista y acelerar la caída hacia la marca psicológica clave de 1.3000. El deslizamiento bajista podría extenderse aún más en el corto plazo para probar su próximo soporte principal cerca del mango de 1.2900, marcado por un 61.8% de nivel de retroceso de Fibonacci del 1.1987-1.4377 fuerte movimiento ascendente.