Si el EUR/USD logra afianzar sus alzas, la primera resistencia en consideración se localiza en la región de 1.1130/1.1145, área donde converge una directriz bajista de largo plazo extendida desde febrero de 2018 y la media móvil de 200 días. Una ruptura de este techo técnico facilitaría la reconquista de los 1.1225, nivel correspondiente al retroceso de Fibonacci de 50% de la caída de enero a octubre de este año.
Por el contrario, si los vendedores retornan al mercado (escenario con alta probabilidad), es necesario vigilar de cerca el soporte en los 1.1075. Un desglose de este piso activaría una fuerte señal bajista capaz de provocar un retroceso hasta los 1.0990.