La cotización del EUR/USD se mantiene en terreno negativo y acentúa las caídas, tras marcar un mínimo intradía en los 1,1153 dólares por euro, muy cerca otra vez del mínimo de dos años registrados el pasado viernes, 26 de abril, en los 1,1111 dólares por moneda única.
Esta caída se produce a pesar de que las primeras estimaciones de la Oficina Europea de Estadísticas, Eurostat, para el Índice de Precios al Consumo (IPC) del mes de abril, sitúan a la inflación subyacente en el conjunto de la eurozona en su nivel más alto desde el mes de agosto de 2017.
Según las primeras cifras ofrecidas por la Oficina, la lectura subyacente del IPC, aquella que excluye para su cálculo los elementos más volátiles como como los combustibles o los alimentos frescos, se disparó cuatro décimas en el mes de abril, hasta el 1,2% interanual, por encima incluso del 1,0% estimado por los analistas.
Por su parte, la lectura central de este mismo indicador apunta a un encarecimiento de la cesta de la compra de los ciudadanos comunitarios del 1,7% en el cuarto mes del año en curso, frente al 1,4% registrado en el mes anterior y al 1,6% previsto por el mercado.
Pese a la fuerza del repunte, el mercado es muy consciente de que, en esta ocasión, los precios se han visto muy influidos por celebración de la tardía celebración de la Semana Santa, cosa que no sucedió el año pasado, y que ha provocado un alza de algunos precios en el mes de abril, como el de los alojamientos hoteleros o los paquetes turísticos.