Científicos de la universidad de Tokio (Japón) presentaron a Kengoro, el robot que suda. Lo hicieron la semana pasada en la Conferencia Internacional sobre Robots y Sistemas Inteligentes, según informa el portal Spectrum.

La transpiración del robot no es un capricho. Con un funcionamiento similar al de los humanos y otros mamíferos, el sudor le permite enfriar los motores que le dan movimiento para poder funcionar por más tiempo. Además, evita usar otros sistemas tradicionales de refrigeración, como ventiladores o radiadores.

En el caso de Kengoro -un humanoide que mide 1 metro 70, pesa 56 kilos y tiene 108 motores-, se trata de agua destilada que brota de sus huesos metálicos, los cuales trataron con láser para transformarlos en una suerte de esponjas de aluminio.

A medida que el robot se mueve, sus motores se calientan y el agua se mueve desde el interior de la estructura metálica a la superficie, donde se evapora. Esto enfría los motores y les permite funcionar por más tiempo.

Según los científicos, el robot Kengoro consume -en la parte de transpiración- un vaso de agua deionizada por cada medio día de funcionamiento, aunque esto varía dependiendo de las labores de la máquina. Y afirman que este sistema es tres veces más eficiente que la refrigeración usando ventiladores o haciendo circular agua por su interior. No es, sin embargo, tan eficiente como usar un radiador.